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El Jefe Eres Tú
4 de septiembre de 2017 16:20

Si da al fío asegúrese que la gente sea de ‘buena paga’

Los timadores confunden a sus víctimas insertando dinero falso con las divisas originales. Foto: Archivo /UN

Si tiene el corazón de algodón y decide fiar es importante que siga una lista de estrategias y consejos. Foto: Archivo /UN

Redacción El jefe eres tú

Hoy no fío, mañana sí. Este es un letrero que se observa en muchas tiendas de la ciudad. Sin embargo, hay casos en que los tenderos sí fían.

Existe el riesgo de que sus clientes no llegue a pagarle, pero también hay estrategias para continuar dando este “servicio” sin contratiempos.

Por ejemplo, haga como los bancos. Pregunte la dirección, teléfono y hasta, con los vecinos, si la persona a la que va a fiar es buena pagadora o si queda mal.
Una vez que empiece a fiar llene la información en una libreta con el nombre, la fecha, el total de la cuenta y hasta la lista de productos que el cliente llevó.

De ser posible, el cliente debe dejar alguna prenda para que usted tenga la seguridad de que vendrá con la plata. Conocido es que en las tiendas reciben hasta la cédula cuando se fía algún producto.

A algunos tenderos les ha ido bien dando al fío. Se basan en el adagio popular de que el que no fía no vende.

Algunas personas realmente pasan por necesidades y el tendero se convierte en un comerciante que coloca su producto y apoya a una familia en problemas. Si hay ética en el comprador todo saldrá bien.

Carlos Paredes, dueño de un negocio por la zona de La Concepción, considera que una buena opción para fiar es hacerlo solo con personas a las que se conoce.

Algunos detalles que debe tomar en cuenta

Si decide fiar es importante que sea solo en pequeñas cantidades. Evite que los clientes lleven una lista abultada.

Ponga límites al fío. No es aconsejable que se fíe a alguna persona por más de tres ocasiones.

Máximo dé a una persona el plazo de un mes para que cancele. Si no lo hace búsquelo en su casa y exija el pago.

El círculo  de personas a las que fíe debe ser muy reducido. Si fía a más no tendrá efectivo y no tendrá liquidez.

Tome  en cuenta que sus proveedores exigen pagos rápidos. Si los plazos son cortos decida no fiar a sus clientes.

Asesórese con especialistas en cobranzas si es que no puede hacerlo usted. Puede buscar mediar con el deudor.