La 'Tuka' cantó a viva voz: ¡No te olvido Manabí!
Roberto ‘La Tuka’ Ordóñez demostró por qué es el más querido en Manta. Ayer, en medio de la preocupación por la salud de su mamita, sacó fuerzas y se mandó dos tantos en la goleada 4-1 del Delfín ante Liga de Quito.
En la semana hubo tensión. Fueron días largos para la plantilla del ‘profe’ Guillermo Sanguinetti. Es que la fiesta se postergó el miércoles y daba la sensación de que los festejos podían complicarse ante Liga de Quito.
Sobre todo en el primer tiempo. Los cetáceos llegaban al arco de Daniel Viteri, pero les faltaba contundencia. A los dos minutos apareció el nuevo ‘Ídolo’ del Puerto. La ‘Tuka’ Ordóñez puso en aprietos a una defensa que dio libertades a la dupla goleadora del torneo. El guayaquileño apareció para “anotar” un casi gol. Es que el árbitro Diego Lara anuló la primera conquista por una mano clara en el área.
Después de esta acción, el equipo del DT Gustavo Munúa intentó reaccionar, pero sin ideas claras.
Delfín intentaba controlar sus ansias de festejar. En momentos del partido se mostró desesperado por abrir el marcador. Hubo nerviosismo y se lo notó en los más pelados del equipo. Jordan Sierra lució errático y esto hizo que Sanguinetti lo sacara de la cancha para el segundo tiempo.
Para colmo, los albos empezaron ganando. Al minuto 44, cuando Liga parecía que se acomodaba en la cancha del caluroso estadio Jocay, José Francisco Cevallos sacó un centro para Hernán Barcos, pero antes fue interceptado por el venezolano Jhon Chancellor. El zaguero cetáceo metió el pie y mandó la pelota a su propia meta.
En ese momento parecía que la fiesta se volvía a aplazar. Los hinchas se preguntaban entre sí por el resultado del Barcelona en Ambato. Hubo algo de calma cuando se enteraron que los toreros empataba 1-1.
El Segundo tiempo, Delfín se apropió de su estadio. Desnudó a una débil defensa que mostró cansancio por el calor y la humedad.
Ordóñez se apoyó en su corpulencia para sacarse a los defensas de la ‘U’. Aprovechó un centro de Marcos Cangá para sacar un cabezazo que dejó mal ubicada a la zaga y al golero. Fue un gol de tranquilidad. Con el empate ya podían festejar largo.
Pero en el Delfín no se conformaron con el 1-1. Salieron a ganar. Geovanny Nazareno, el último en incorporarse a la plantilla, puso el 2-1. Lo celebró con la hinchada y sus compañeros. Fue un gol especial para él porque hace dos años y medio que no marcaba.
Para deleite del público, la ‘Tuka’ volvió a aparecer. Dejó desparramado a Viteri y sacó un remate a ras de piso. Ese gol encendió a los hinchas. Era el 3-1 que ponía un poco más de espectacularidad al juego.
Para cerrar la fiesta, Francisco Mera -que ingresó en el segundo tiempo para reemplazar a Sierra- marcó el cuarto gol. Fue un triunfo con mucho significado. “El equipo que le dio alegría a la gente después del terremoto lo vuelve a hacer”.
Por donde se vea, la goleada de ayer es histórica. Este equipo jamás había clasificado a la Libertadores y menos a una final del torneo. Los festejos en el camerino fueron a puerta cerrada. Mariano Zambrano, prefecto de Manabí, estuvo presente. En los pasillos se escuchaba el golpe de los pupos contra el suelo y el último Padre Nuestro del día. Hoy está previsto que los festejos continúen. Habrá una caminata hasta Montecristi para agradecer a la virgen de Monserrate.
