El robo de rejillas no paran en Quito
Arelí Yánez es una joven estudiante de 22 años. Comenta que hace dos meses se dirigía en su carro hacia su universidad.
Sin embargo justo en la esquina de la avenida Toledo y Coruña el semáforo se puso el rojo y al frenar su vehículo cayó en un profundo hoyo. “Me asusté y al bajar vi que la llanta delantera derecha cayó en una alcantarilla sin tapa. Por suerte dos señores que estaban cerca levantaron el carro y pude salir de ahí”, dice Yánez.
Pero esto no quedó ahí. Debido al golpe en la llanta, tuvo que hacer una alineación y balanceo, una revisión de los amortiguadores y de la suspensión, eso implicó un gasto de USD 80.
Este inconveniente sucede en algunas calles de la Floresta. Tampoco existen tapas en la Coruña, Francisco Salazar, Toledo, Isabel La Católica, entre otras.
Además de generar accidentes entre vehículos, Amira Pérez, miembro del Colectivo Cultural de la Floresta, indica que al no tener rejillas, las alcantarillas retienen los desechos sólidos. Esto obstruye y tapona las tuberías del alcantarillado. Como consecuencia se pueden generar graves inundaciones.
En este marco, Paúl Calle, subgerente de Saneamiento de la Empresa de Agua Potable (Epmaps), indica que faltan alrededor de 6 000 rejillas en Quito. Sin embargo, pretenden que hasta fines de este año se logre la reposición del 40%. Calle indica que ya se ha dado la reposición en algunas parroquias rurales, por ejemplo en Cumbayá, Tumbaco y Pomasqui.
Hasta este momento ya se han repuesto 820 rejillas lo cual ha significado una inversión de USD 261 876. Existen dos tipos de rejilla, unas de 50 cm por 36 cm las cuales tiene un costo de USD 298,53 y otras de 100 por 60 cm cuestan USD 370,44.
Para los vecinos que se den cuenta que se han robado las rejillas en sus sectores de vivienda pueden reportar llamando al 1800 242424 o en redes sociales a @aguadequito Twitter, aguadequito Facebook o Aguaquito Instagram.
Una de las recomendaciones de Calle para los vecinos es que no arrojen basura en los sumideros, para beneficio de todos. Lo ideal es que los desechos se coloquen en los contenedores de basura.
En varios sectores de la ciudad, ciertos individuos roban las rejillas de las alcantarillas. En la avenida Eloy Alfaro a altura de la José Queri de norte a sur existen tres alcantarillas seguidas sin tapas.
Por esa razón los conductores tienen que estar pilas para no caer en esos huecos. En el sur de la ciudad ocurre lo mismo.
En la calle Ajaví, en el barrio de Solanda, justo frente a la Unidad Educativa Consejo Provincial. Pero no todo es malo. Adriana Pérez cuenta que varios meses pasó sin rejilla la alcantarilla en la intersección de las calles José Abarcas y José Alemán. Sin embargo, desde hace unos días ya colocaron la estructura.
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