A Tababela, en mulas

Alcalde creó la Empresa Metropolitana de Mulas Aeroportuarias. Pueden ir por caminos de herradura ya existentes.Desde hace rato se viene amenazando con inaugurar el nuevo aeropuerto de Quito, pero pese a la excelente planificación del Concejo Metropolitano, el plazo para el evento cada vez se ha hecho más largo que la pista de la terminal aérea en mención.

No ha sido fácil, no por la magnitud de la obra, sino por inconvenientes como la realización y aborto de los concursos para buscarle nombre y la construcción de vías de acceso, como la Ruta Viva, que tenía velocidad de sepelio. u00a0Pero el Alcalde dijo que el 20 de febrero próximo, coincidencialmente tres días después de los comicios, el aeropuerto funcionará de angas o de mangas; o sea: si el resultado en las elecciones les es adverso a los aliancistas ya tendrán por dónde salir volando.u00a0Ante la evidente falta de accesos, los pilas de sus asesores le han dicho al Alcalde que se aguante un chance porque la Ruta Viva todavía está medio en obra muerta, pero él no quiere oír y sigue empecinado en que su obra faraónica, que empezó el Paco Moncayo, empiece a funcionar. u00a0Hasta dizque se ha puesto bravo diciendo: u00a1Qué accesos ni qué ocho cuartos, ustedes siempre me han dicho que hay que evitar los accesos! No, señor Alcalde, con el respeto que usted se merece, no se confunda, accesos son una cosa y excesos otra, le habrían contestado.u00a0Pero el lío del acceso vía terrestre al aeropuerto nuevo está solucionado con la creación de la Empresa Metropolitana de Mulas Aeroportuarias de Quito (EMMAQ), que dará el servicio de acémilas para transportar pasajeros y carga desde Quito al aeropuerto y viceversa.u00a0¿Cuál cree que avanzará más rápido: el servicio de mulas o las vías al nuevo aeropuerto? Déjenos su comentario