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2014-04-15 15:38:20

Casi no se ve la luna roja en Quito

La luna cambió de anaranjada a un color rojo sangre esta madrugada, 15 de abril, en un eclipse lunar total que pudo verse en todo el continente americano, según los expertos de la Agencia Aeroespacial Estadounidense (NASA).

El fenómeno, el primero de una tétrada de lunas rojas que se repetirá prácticamente cada seis meses de aquí a octubre del próximo año, se produjo durante unas tres horas a partir de las 07:06 GMT, 02:06 de Ecuador, y duró algo más de 75 minutos, informaron los expertos.

Es un fenómeno que no es extraño pero poco frecuente. La vez anterior se produjo el 10 de diciembre de 2011, pero antes del Siglo XX, hubo un período de 300 años en el que no hubo Lunas rojas, afirmó el experto en eclipses de la NASA Fred Espenak.

En Norte y Suramérica, donde la Luna se vio de manera más prominente, los espectadores pudieron ver el espectáculo con binoculares, telescopios y pudieron sacar fotografías.

Los eclipses totales de la Luna se producen cuando hay un alineamiento casi perfecto entre el Sol, la Tierra y la Luna, al proyectar la Tierra su sombra sobre el satélite cuando está en fase de luna llena.

Sin embargo, la Luna no desaparece totalmente de la vista, sino que se tiñe de rojo, porque la atmósfera de la Tierra filtra la luz solar y deja pasar solo el rojo, que se proyecta sobre la Luna.

El espectáculo sólo ocurrirá siete veces en este siglo y la última vez que tuvo lugar una serie de cuatro eclipses lunares totales ocurrió en 2003 y 2004. EFELa luna roja en Quito

Las nubes conspiraron contra los quiteños, lo que impidió ver con claridad el fenómeno de la luna roja. A las 02:30, en el norte y sur de Quito, solo se podía ver un manto negro en el cielo.

En el sector de la Mitad del Mundo, la luna también estuvo esquiva.

Quienes se perdieron del espectáculo podrán verlo el próximo 8 de octubre. Entonces el Sol, la Tierra y la Luna se alinearán perfectamente por segunda ocasión y la Luna adquirirá ese tono rojizo.

Desde América se lo podrá disfrutar si las condiciones climáticas no vuelven a frustrar a los aficionados de los astros.

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