Padecía Parkinson
El actor Robin Williams estaba sobrio al momento de su muerte, pero sufría las primeras fases de la enfermedad de Parkinson, así como ansiedad y depresión, afirmó hoy, 14 de agosto, su viuda, Susan Schneider, en un comunicado.
Schneider reconoció que el actor, que fue encontrado muerto en su casa, no estaba preparado para compartir su enfermedad públicamente.
Williams, de 63 años, protagonista de películas como La sociedad de los poetas muertos o Señora Doubtfire fue encontrado sin vida por su asistente personal el lunes y quedó determinado que murió en un suicidio por ahorcamiento.
El actor había hablado abiertamente de sus problemas con el alcohol y se había sometido a terapias de desintoxicación para superar sus adicciones. Jamás dijo nada de su insipiente enfermedad.
Las autoridades ya hablan de suicidio como la probable causa de la muerte, si bien la investigación aún no ha concluido y falta por conocerse los resultados de las pruebas toxicológicas realizadas al cadáver.
Robin pasó gran parte de su vida ayudando a los demás. Entretuvo a millones sobre el escenario, en el cine o la televisión, a nuestras tropas en el frente y consolaba a los niños enfermos, afirmó su esposa en un comunicado.
Su mayor legado, además de sus tres hijos, es la alegría y la felicidad que ofreció a los demás, especialmente a aquellos que se enfrentan a batallas personales, amplió.
Y luego dijo que la sobriedad de Robin estaba intacta y era valiente mientras luchaba con sus propias batallas de la depresión, la ansiedad, así como las primeras etapas de la enfermedad de Parkinson, que él aún no estaba dispuesto a compartir públicamente.
Es nuestra esperanza, a raíz de la trágica muerte de Robin, que otros encuentren la fuerza para buscar la atención y el apoyo que necesitan para tratar cualquier problema al que se enfrenten para que puedan sentir menos miedo, completó Schneider.
ANSA
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