Una parada al aire libre

Los conductores de buses interprovinciales están acostumbrados a hacer una pausa en su recorrido.

Las unidades que parten desde la terminal terrestre de Quitumbe, en el sur, se detienen al llegar a Tambillo, en el cantón Mejía, para tomar más pasajeros.Al llegar cerca de los rieles del tren los conductores se detienen y empiezan a ofertar sus destinos: Quinindé, Quevedo, Santo Domingo, Ambato, Riobamba, Puyo?

Los pasajeros esperan sobre la calzada. No se cuenta con una cubierta. Alicia López, moradora de San Bartolo, acude al lugar para coger un bus e irse hasta Riobamba.

Para ella esta es la forma más rápida de tomar una unidad. Ir a la terminal demanda más tiempo: debe coger un trole, comprar el boleto y esperar el bus.

Las unidades que parten desde Quitumbe salen con unos sellos de seguridad en las puertas. No se puede recoger pasajeros hasta llegar a Cutuglagua.

En ese sector se retiran los adhesivos, pero no hay una concentración masiva de usuarios. Por eso se hace escala en Tambillo.

Los habitantes de Amaguaña, Conocoto, en cambio, van a Tambillo por la cercanía. Angélica Hidalgo, moradora de Amaguaña, se toma 15 minutos para llegar a la improvisada parada de buses interprovinciales.

Ir a Quitumbe le demandaría de una hora. Daniel Jácome, ayudante de la Coop. Alóag, contó que si los buses tienen asientos disponibles, se detienen en Tambillo unos cinco minutos para completar su capacidad.

Los pasajeros vienen acá, no a Cutuglagua. Ahí no hay donde parar. Eleodoro Alvarado, dirigente de la Asociación Virgen del Quinche, trabaja en la parada de Tambillo.

Él considera que el movimiento en la zona se produjo, luego del cierre de la parada de Guamaní. Esto ha generado inseguridad. Por eso espera que se realice una reubicación.