Un paseo por 'La isla de las flores'

En la obra 'La isla de la flores' se abre un espacio para reflexionar sobre el consumismo y el valor del tiempo en la sociedad contemporánea.

Bajo esta premisa nace una obra que busca crear conciencia de la calidad de vida de las personas. El trabajo, las preocupaciones por el dinero y los bienes materiales son algunos de los elementos que hacen que las personas no tengan tiempo para darse cuenta que aún están vivas.

Con este pensamiento la obra quiere ilustrar que la felicidad no la marca el dinero, sino los detalles que conforman la existencia humana.Todo esto enfocado en la importancia de compartir junto a las personas más queridas.

En técnica Clown, una pareja decide irse de vacaciones para alejarse del ruido mundano. Ambos buscarán un respiro a tanto estrés y en este cambio de aire aspiran encontrar la felicidad.

Lo que no toman en cuenta es que el estrés se va con ellos de paseo. La playa será un paraíso momentáneo hasta que se dan cuenta que la felicidad ha sido confundida con la abundancia material.

Desde ese momento de claridad, los protagonistas tratarán de salir del círculo vicioso del que -sin querer- son presas.

Cuando piensan que no habrá salida, un giro inesperado en sus vidas les hará valorar la sencillez para poder encontrar el rumbo que han perdido.

La técnica del Clown es la herramienta idónea para contar esta historia, pues se apega a ironizar la realidad y sacarla hacia un contexto humorístico.

La felicidad es algo que se ha dado por sentado, pero está cerca y lo importante

según la obra- es que el público se dé el tiempo no solo de sentirla, sino de vivirla por completo.

'La isla de las flores' es una obra dirigida por Mauricio Gallegos, quien también es uno de los protagonistas, junto a Sofía Domínguez.

Una puesta en escena sencilla pero clave muestra el intento de dar el verdadero valor a la felicidad.

Ana Veintimilla. (I)abveintimilla@elcomercio.com

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