Embudos que alegran el jardín
Lo primero es sacar los rizomas de alguna planta saludable. Estos deben estar con yemas.Las calas o cartuchos son plantas muy populares en el país, especialmente en la Sierra.
Se le considera una planta suculenta, porque posee un tallo grueso que acumula agua y humedad, explica el Ing. Marcelo Zúñiga, de Decojardín El Colibrí, de Sangolquí.Son muy decorativas y su cultivo es fácil y no requiere de muchos cuidados, explica el jardinero Ramón Duicela.
Habitualmente se reproducen por división de rizomas (bulbos), aunque también se pueden sembrar por semillas, explica Zúñiga.
Los rizomas se deben escoger de una planta sana. Se debe cuidar que cada parte contenga, al menos, una yema lateral. De esa forma se asegura mejor el brote de nuevas plantas, explica Duicela.
Se pueden cultivar en tierra o en macetas. Cuando se elige el último método se deben trasplantar, según el crecimiento , a macetas más grandes y, luego, al suelo.
El sustrato que mejor les va a estas variedades es el compuesto por tierra fértil y turba, con pequeños aportes de arena y compost orgánico. El abono con fósforo y nitrógeno ayudará a que se produzcan floraciones espléndidas.
El riego debe ser selectivo, cuidando que el suelo esté siempre húmedo.La cala o cartucho se siembra por rizomas (bulbos) y no requiere de cuidados especiales
Trucos caseros
La chilca, el ?sigse (foto), la paja y la ñachag son plantas serranas que, por crecer como si fueran hierbas malas, no ha sido consideradas como decorativas. No obstante, hay una tendencia a utilizarlas cada vez más en el adorno de rocallas, parterres o rincones.
Una ventaja ?de estas variedades es que son muy resistentes a los climas fríos y, asimismo, a los cambios bruscos de temperatura. Tampoco necesitan de mucho riego.
El sigse ?es una especie muy invasiva. Por eso, cuando se siembra en un jardín hay que cuidar de que no crezca mucho. Hay que recortarlo periódicamente, en número y altura.
Como todas? las plantas de jardín, las de páramo o zonas frías también requieren de podas periódicas. Aunque crecen en suelos pobres, el sustrato orgánico les va muy bien.
Redacción Construir(I)
