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2015-05-12 06:31:55

José Carollo vive en el sur

ElEl padre Carollo (arriba) 'era espiritual y pru00e1ctico', afirma el sacerdote Juliu00e1n Vallotto, que sigue el legado de su compatriota. Foto: u00daN.
Diana Chamorro

En la Quito Sur, la habitación del padre José Carollo permanece intacta. Es un lugar sencillo, apenas caben una cama, un escritorio y un armario, todo de madera. Ese material era como la marca de este hombre nacido en Carré, en Italia, pero nacionalizado ecuatoriano.El 13 de mayo del 2015 se cumplirán 10 años de la muerte del 'sacerdote constructor', quien le dio al sur un hospital, un centro médico, guarderías y puntos de cuidado de adultos mayores y personas con discapacidad.

Cada año, en todos los servicios, la Fundación Tierra Nueva realiza un millón de atenciones. Se incluye cirugías gratuitas de cadera, rodilla, pie equinovaro, que hacen misiones médicas que llegan del exterior.El sacerdote Julián Vallotto, de 72 años, abre la puerta de la parroquia, en la Quito Sur. Pide ver un mensaje escrito a la entrada. Es una frase que repetía su compatriota, quien murió a los 74 años. No deseo ningún reconocimiento especial. Ni placas ni honores. Tan solo que se manifieste más el amor de Dios para los más humildes.Valloto tiene buenos recuerdos de Carollo, quien lo refugió en su parroquia tras haber sido calificado como subversivo en Muisne, Esmeraldas. Fue un gigante de la vida cristiana, a veces creo que no ha sido suficientemente comprendido por otros curas de Ecuador, dice Valloto.

Carollo fue párroco de la iglesia de El Girón, en el centro norte. Y decidió dejarla para hacer obra en un sector marginal, en el sur.

Se anticipó al mensaje del papa Francisco, quien pide a los religiosos salir a las periferias reales de la vida. Eso era el sur, quizá aún lo es. Carollo escogió eso. Comprendió que la iglesia debe estar en esas realidades, dice Valloto.

En el sur, en los centros de cuidado infantil, de personas con discapacidad y en el dispensario médico lo veían como un constructor. En su habitación aún se observan cuadernos con trazos que hizo: eran parte de sus sueños. Por algo cuando la gente lo veía llegar decían: 'Ahí viene el padre Carollo con sus Cantuñas'. En tiempo récord levantaba obras.

Mariela Rosero Ch.