Para decorar con devoción

Una costumbre para mantener vivo el espíritu católico ha sido el uso de imágenes religiosas en casa.Esas estatuillas, muchas veces señaladas como milagrosas, se han convertido en piezas ornamentales.

En Lo Nuevo y lo Viejo, donde se restauran muebles y objetos decorativos antiguos para comercializarlos a consignación, hay varios ejemplares.

Se destaca una escultura de San Francisco, que data de finales del siglo XIX. Lleva una calavera en su mano izquierda.

Está hecha de madera y es policromada (varios colores). Además, sus ojos son de vidrio, lo que le da una apariencia realista.

Otra opción recomendada por María Moncayo, propietaria del lugar, es una cruz hecha en madera y latón, en la que Jesús está elaborado en peltre (aleación de estaño, cobre, antimonio y plomo).Data de hace 80 años.

Sin embargo, si lo que prefiere son figuras contemporáneas, la alternativa es Esculturas San José. Allí se ofrecen santos, vírgenes, ángeles, cruces?

En este negocio, que nació en 1957, se trabajan, entre otros materiales, con fibra de vidrio y resina poliéster de cuatro calidades.

Según Antonio Jaramillo, propietario de este taller, hay una línea para exteriores. Estas esculturas son trabajadas con poliuretanos (resistentes a los UV), que alargan su durabilidad hasta ocho años.

Las imágenes cobran vida gracias al uso de pinturas al óleo, que dan efectos visuales de transparencia, luminosidad o sombra.

Redacción Construir. (I)