2 accidentes casi a la misma hora y lugar

Hubo heridos y la carga del camión con costales de papas quedó desperdigada.El camión lleno de papas cayó en el patio de una casa del barrio La Colina, en Guayllabamba, a la altura del puente sobre el río Coyago (a 25 minutos de Quito).Los vecinos escucharon un fuerte estruendo y al salir de sus viviendas se encontraron con una escena de susto: los fierros retorcidos del vehículo y decenas de costales desperdigados en el piso. El hecho se registró a las 00:30 de ayer.

Una hora antes de este siniestro, una camioneta doble cabina Chevrolet se accidentó en el mismo sector y se reportaron tres heridos. Todo fue muy rápido.

En el primer choque, los chicos se estrellaron contra el parterre del puente y luego terminaron chocándose contra el muro de mi casa, contó Marcelo Chávez, vecino del sector.

Los agentes de la Policía Nacional acudieron inmediatamente al sitio para ayudar a las víctimas de los dos percances.

Los uniformados confirmaron que en la camioneta iban tres jóvenes, de entre 20 y 23 años. Uno de ellos fue trasladado a un centro de salud cercano al sitio del percance, mientras que a los otros les dieron el alta inmediatamente tras ser evaluados por los médicos del centro de salud.

El Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) indaga las causas de los siniestros.

¿Cómo fue el accidente del camión? Los moradores del sector recordaron que el carro iba por la avenida principal y curvó hacia la calle 2 de Noviembre que es paralela a la carretera principal.

En ese instante, el chofer perdió el control del vehículo, rompió un pequeño muro de piedras y rodó una pequeña pendiente de 10 metros hasta impactarse contra el patio de la casa.

El conductor del camión resultó con pequeños golpes y era asistido por sus familiares. Una pariente apenas contó que él presentaba golpes por el accidente, pero se encontraba estable de salud.

Ayer por la mañana, las mascotas de la vivienda en donde fue el accidente del camión se acostaron sobre las papas desperdigadas y tomaban sol que, a esa hora, era intenso.

En ese momento, personal de la Policía Metropolitana de Tránsito inspeccionaban cómo se retiraba el vehículo y lo retiraron de allí cerca del mediodía.

Diego Bravo (I)