Más buses para La Tola
El taxismo informal, en la Don Bosco, es muy demandado por los vecinos. Foto: Betty Beltru00e1n / u00daNHace un año el problema se hizo crónico. Los buses urbanos que suben desde la av. Pichincha hasta la calle Rita Lecumberry (Tola Baja) son escasos.
La afirmación es de Iván Cando, coordinador del Cabildo de La Tola. Y agrega que ante la falta de unidades, el transporte informal (taxis) ha sido la salvación de los moradores del sector en el cual confluyen las tres Tolas (Alta, Baja y Colonial).
Los problemas con el servicio urbano también los comenta Teresa Herdoiza, presidenta del Comité Promejoras.
La dirigente indica que la cooperativa que cubre la ruta no cumple con las frecuencias previstas desde las 06:00 hasta las 21:00 y la gente se desespera por salir a sus trabajos o sitios de estudio.
En la zona residen, según Cando, más de 50 mil personas y ya es hora que se tomen en cuenta las necesidades, sobre todo las del transporte.
La sugerencia es que se sume una cooperativa más y, sobre todo, más unidades. A todo esto, el tercer pedido: que las frecuencias sean con un intervalo de 10 minutos, pues -como dice Herdoiza- la gente se desespera por movilizarse.
Cando también aspira que con la creación de la veeduría ciudadana -que se oficializó el lunes 21 de septiembre-, para vigilar los indicadores de calidad del servicio urbano público, se mejore el transporte.
El vecino Leonel Pintado avala lo dicho por los dirigentes y agrega: A falta de buses, ocupamos los taxis informales, un buen servicio para la ciudadanía.
Ante este inconveniente, dicen los dirigentes Cando y Herdoiza, se ha acudido a las autoridades, pero todo ha quedado en nada. Incluso recuerdan que, hace un tiempo, se hizo una fiscalización, y también hablaron con los gerentes de la cooperativa de buses y con las autoridades municipales. Pero no pasó nada...
Betty Beltrán (I)bbeltran@elcomercio.com
