Afros cantan a María

Dios siempre está presente en cualquier acción o situación en la que se encuentre el hombre y la mujer afroecuatoriana.

De ahí que, su religiosidad se afianza en la relación con los intermediarios o santos. Es muy frecuente, desde luego, las novenas a los santos y difuntos; pero también el uso del agua bendita y el rezo del rosario.

Nunca faltan oraciones y cánticos. En el santoral afroecuatoriano se incluyen varios santos y diversas advocaciones de la Virgen María.

Y los altares están, por lo general, en las esquinas de las salas y también en las habitaciones. Juan García, antropólogo e historiador, dice en el libro 'Religiosidad afroecuatoriana', que los afrodescendientes de Colombia y de Ecuador no heredaron tradiciones religiosas con rasgos evidentes y explícitamente africanos.

Más bien, desarrollaron un proceso de aculturación; su cosmogonía africana se relacionó con el mundo religioso católico.

Dicho esto, uno de los santos más venerados por los afrou00adecuatorianos es san Antonio de Padua, pero también la Virgen de El Carmen, san Martín de Porres, Nuestra Señora de Las Lajas, Virgen de las Nieves, san Juan, entre otros.

Lo más característico de todo es que tanto los santos como la Virgen son celebrados con arrullos y con procesiones.

Toda una fiesta de fe y de alegría. Sin embargo, la fuerza espiritual más venerada por los afrodescendientes del Pacífico es la Virgen de El Carmen.

Ella es la encargada de sacar a las ánimas condenadas del Infierno o de la pena eterna, por esto se la representa sobre las llamas infernales.

Por ejemplo, en Selva Alegre y Timbiré (provincia de Esmeraldas) su culto se ha efectuado por décadas y la fiesta se realiza el 16 de julio, con procesiones fluviales o marítimas acompañadas de arrullos y alabanzas. Mientras que a la Virgen de las Nieves se la festeja desde el 27 de julio al 8 de agosto, en el Chota.

Betty Beltrán (F-Contenido Intercultural)