Exgerente en tremendo lío
La jueza de garantías penales Fátima Llundo Vega dictaminó cerca de la medianoche de ayer, 16 de mayo, que el exgerente de Petroecuador, Álex Bravo, permanezca en prisión preventiva. La Fiscalía lo acusa del delito de tráfico de influencias. Permanecerá en la Cárcel 4.La audiencia de formulación de cargos tuvo lugar en la Unidad Judicial de Flagrancia. Duró dos horas y media y tuvo la participación de las partes acusadora y de defensa. Bravo prefirió no participar en las intervenciones. El fiscal Franklin Bravo informó que las investigaciones en este caso se iniciaron ante la denuncia de Pedro Merizalde, actual gerente de Petroecuador.
Ayer en la mañana, Álex Bravo fue detenido en su casa y llevado a la Unidad de Flagrancias. El fiscal anunció que el delito del que se le acusa es el de tráfico de influencias, tipificado en el artículo 285 del Código Orgánico Integral Penal y que estipula una sanción privativa de la libertad de tres a cinco años.
La Fiscalía sostiene que hay un sinnúmero de procesos contractuales que Petroecuador -cuando Bravo era gerente- firmó con empresas que tienen vínculos familiares con el acusado. Estas entidades -según el Fiscal- tienen entre sus accionistas y empleados a familiares de Bravo, incluidos sus hermanos de madre. Miguel Andrade Segarra, abogado de Bravo, indicó que al tratarse de procesos que involucran a las compras públicas se necesitaba al menos un informe de responsabilidades elaborado por la Contraloría para que procediera el pedido de prisión preventiva.
Además -dijo- que la Fiscalía no especificó los contratos en los que Bravo cometió el tráfico de influencias y en qué grado lo hizo. Tras unos 30 minutos de deliberación, la jueza Llundo ordenó la prisión preventiva de Bravo, la retención de sus cuentas y la prohibición de enajenar bienes.
Alexis Mera, secretario jurídico de la Presidencia, en compañía de Leonardo Orlando, director del SRI, estuvieron en la Unidad de Flagrancia. Mera indicó que las investigaciones dirán si hay más involucrados en el delito.
Mario Alexis González. (I)
