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En Las Aulas
9 de septiembre de 2020 13:03

Al usar la web deben vigilarse riesgos

Es muy importante que los padres estén pendientes de qué actividades realizan sus hijos en la web. Foto: www.freepik.es

Es muy importante que los padres estén pendientes de qué actividades realizan sus hijos en la web. Foto: www.freepik.es

Redacción En las Aulas (I)

Internet se ha vuelto, con más fuerza desde que comenzó la emergencia sanitaria por el covid-19, una herramienta necesaria en la educación de los alumnos, incluso desde edades tan tempranas como las de los niños de educación inicial. Sin embargo, esta extensión en el tiempo en que los niños y adolescentes permanecen conectados suponen una obligación para que los adultos a cargo los ayuden a identificar los potenciales riesgos para su bienestar.

En este sentido, la publicación estadounidense Consumer Notice recomienda que padres y maestros comprendan primero cuáles son los principales peligros. Aunque sus especialistas reconocen que es un gran desafío, sobre todo para quienes pasan de los 50 ó 60 años, están convencidos de que mantenerse al día con las redes sociales y ‘apps’ que utilizan los menores de edad es la mejor forma de ayudarlos a identificar cualquier cosa que no esté bien.

Es bueno conocer que en una gran cantidad visitadas por los chicos se puede infiltrar ‘software’ o programas maliciosos que tienen la finalidad de espiar y robar datos. En este sentido, lo más importante es no dar ‘Yes’ si se abre una ventana con una pregunta en inglés y no se entiende.

También hay que tener mucho cuidado con los juegos que aparecen en las redes sociales; muchas de esas aplicaciones se quedan con información del usuario sin que este se de cuenta.

Respecto a la interacción con desconocidos, vale la pena que la próxima vez que conversen se pregunte a niños o adolescentes si les darían fotos suyas a una persona que recién conocen en la calle. Lo más probable es que digan que no, ¡entonces menos hay que hacerlo por internet!

Reglas claras
Los chicos Nunca deben entregar en línea información personal, ni siquiera su fecha de cumpleaños, a personas que no han conocido primero ‘en vivo y en directo’.

No deben publicar
fotografías en ningún sitio de acceso público; los agresores infantiles suelen hacer un mal uso de esas imágenes.

Tampoco se les puede permitir chatear con extraños, ni abrir un correo electrónico de una persona desconocida. ¡Mucho menos acceder a reunirse!