No es lo mismo sin Cavani
Antoine Griezmann, el más uruguayo de todos los franceses, avanzó por el sector izquierdo, como tantas veces durante el partido. Alistó la pierna y ensayó un remate que salió más al cuerpo del golero Fernando Muslera. Era un remate, a priori, manejable, pero el 1 de Uruguay puso mal el brazo, la pelota rebotó y se fue dentro de las mallas.
Era el 2-0 para Francia y, pese a que faltaba media hora para el final, los jugadores ‘yoruguas’ sabían que todo se había consumado. La ‘Celeste’ abandonaba el Mundial esta mañana, 6 de julio del 2018, mientras que los galos, un equipo que juega de frac y pajarita, se convirtió en el primer semifinalista. El equipo de Didier Deschamps es un candidato serio para ganar la Copa.
Griezmann, que toma mate en las concentraciones, baila cumbia de Rombái y Márama, come dulce de leche y habla con acento rioplantense, decidió no celebrar la conquista. Su amor por Uruguay va en serio tras años de compartir con jugadores celestes.
Hoy en la cancha, había dos ‘celestes’ que lo conocían muy bien: sus compañeros en el Atlético de Madrid, José María Giménez y el capitán Diego Godín.
Sin embargo, el ariete se dio modos para generar peligro en el ataque. Es que Francia es un equipo con muchos recursos, capaz de lastimar por dentro con el tanque Oliver Giroud y por fuera con el mismo Griezmann y con la naciente estrella Kylian Mbappé.
Uruguay en cambio, dijo ‘se acavani’ la Copa, tras no poder contar con su figura, Edinson Cavani. Al final, el del PSG francés no fue alineado y su puesto fue ocupado por Christian Stuani, quien no dio la talla para la misión. Sus prestaciones no fueron las mismas e incluso el pobre de Stuani no llegó puntual a la cobertura de Raphael Varane, en el primer gol francés, a los 40’.
Los ‘charrúas’, mermados sin Cavani, condicionados en el marcador con el gol de Varane y por la gran calidad del rival que tenían enfrente, apelaron al corazón en el segundo tiempo para empatar el juego. Entonces llegó el error de Muslera, golero histórico de la ‘Celeste’ que hizo que todos los muchachos bajaron los brazos.
Aguerridos, furiosos por la suerte del partido, los del ‘Maestro’ Tabárez casi se van a los puñetes con sus rivales, luego de que interpretaron que Mbappé los estaba sobrando, al intentar hacer un lujo cerca del área. Ojo con Francia: es un lindo equipo que puede dar qué hablar.
