Dimes y diretes entre directivos del fútbol
Entre el 24 de abril y ayer, la emisión de cartas, las discusiones y los cruces verbales entre los dirigentes del fútbol ecuatoriano se han multiplicado.
La decisión del Directorio de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) de remover a Francisco Egas de la presidencia prendió una mecha difícil de apagar.
Después de la polémica resolución tomada por seis de los nueve integrantes del Directorio llegó el Congreso Extraordinario, el pasado 1 de mayo, y la división ha sido más evidente.
¿Quiénes empezaron la bronca? Los primeros protagonistas fueron Francisco Egas y Jaime Estrada, el vicepresidente de la FEF y quien llegó como el binomio de Egas al cargo.
Después de 14 meses comenzaron a sacarse los cueros al sol. Estrada justificó el plan de remover al ‘presi’ porque no se conocía el contrato del DT Jordi Cruyff, se cuestionó el salario del secretario de la FEF, Gustavo Silicovich, y el acuerdo de la supuesta reducción salarial de Cruyff dinamitaron la relación.
Egas puso picante al decir que hubo una supuesta insinuación de Estrada para que comparta una parte de los ingresos que recibe mensualmente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
El distanciamiento entre los directivos se fue acentuando. Estrada, después de asumir el cargo con seis votos del Directorio, ya se reunió con el presidente de la Liga Profesional, Miguel Ángel Loor, en las oficinas de la FEF en Guayaquil.
“Hubo decisiones que no conocía el Directorio. Hemos sido ignorados en algunas cosas. No conocía a Jordi Cruyff hasta la semana pasada”, dijo Estrada.
La gasolina se regó con el Congreso. Esto quebró la unidad de los equipos. Un video publicado con los insultos que se escucharon en medio Congreso originó un pronunciamiento de Esteban Paz, de LDU. Él tildó como un ‘circo’ todo que lo que ocurrió en el Congreso.
El directivo albo escribió: “da lástima que esto haya sucedido en momentos en que todo el país debe estar enfocado en salvar vidas, en estar unidos, en pensar en nuestras familias. Con esto no hay ganadores, solo perdedores. ¡Los dirigentes solo podemos pedir disculpas por todo este circo!”.
En cuestión de horas salió una carta de Barcelona, Emelec y El Nacional. Los presidentes de los tres clubes saltaron al mensaje.
“Una vez más nos llama la atención sus habituales y desafortunadas declaraciones en redes sociales”, empezó la carta .
“Fue preocupante enterarse de las disputas a la interna del directorio de la FEF y lo realmente vergonzoso fue evidenciar las serias irregularidades expuestas en el congreso. Todavía más vergonzoso sería que estas irregularidades se mantengan en secreto como usted sugiere para evitar ‘un circo”, se pudo leer en la polémica carta de los clubes.
Paz no se quedó quieto y también mandó carta, pero ya fue más en un tono pacífico pidiendo que no sigan las peleas y evitando la desunión de los clubes.
La participación de los clubes en el Congreso abrió otro frente. La Asociación de Fútbol No Amateur de Pichincha (AFNA) cuestionó la validez del Congreso y cuestionó que haya participado el Guayaquil City a pesar de haber estado suspendido en la reunión del pasado 1 de mayo.
Nicolás Vega, directivo de AFNA, salió con esta versión. Eso le significó recibir una carta del City cuestionando la versión. “Nosotros no estamos suspendidos”, respondió el club.
Y hay dos episodios más. Emelec envió otra comunicación por su cuenta al abogado Felipe Rodríguez, defensor de Francisco Egas.
Eso se conoció ayer. Neme reclama al abogado por las opiniones y términos usados en contra del Congreso Extraordinario.
El último episodio de pelea ocurrió entre Egas y Amilcar Mantilla, otro integrante del Directorio.
Egas en una entrevista televisiva donde se defendió de las acusaciones soltó una acusación: “la persona que más le cuesta a la Federación Ecuatoriana de Fútbol es Amilcar Mantilla, que gana USD 80 000”, dijo Egas. Mantilla salió a defenderse y dijo que eso recibió por el trabajo desempeñado como directivo que organizaba campeonatos como la Copa Ecuador y el torneo de fútbol femenino.
“A veces es 5 000 dólares al mes no creo que le estoy robando nada a nadie y él (Egas) que gana 240 0000 al año por no ir casi nunca a la Federación, no dice nada. ¿Porqué no se espanta de recibir una remuneración de 240 000 dólares al año?”, dijo Mantilla.
