placeholder
Futbolero
7 de febrero de 2018 10:46

La alegría se cortó en el último minuto

El delantero de Independiente, Billy Arce (derecha) intenta trasladar el esférico ante la marca del lateral Rodríguez de Banfield, en el partido jugado ayer en El Batán. Foto: Patricio Terán / ÚN

El delantero de Independiente, Billy Arce (derecha) intenta trasladar el esférico ante la marca del lateral Rodríguez de Banfield, en el partido jugado ayer en El Batán. Foto: Patricio Terán / ÚN

Pablo Campos
(D)

Había desperdiciado muchas opciones el Independiente. Michael Estrada -que entró al cambio- dispuso al menos tres opciones claras para vulnerar el arco de Banfield, pero no logró convertir el tanto de la tranquilidad. Los argentinos quedaron vivos y al final del partido, Mauricio Sperduti pegó un bombazo para decretar el 2-2 y terminar con el sueño copero de los de Sangolquí.

Nada salió como pensaba el cuadro rayado, que ayer, 6 de febrero del 2018, actuó como local en el estadio Atahualpa. Precisaba un empate 0-0 o una victoria por la mínima para quedarse con la clasificación, pero la sorpresa vino temprano: a los 24 minutos, Banfield se puso al frente con otro balonazo terrible: un espectacular tiro libre que estalló en las redes de Hamilton Piedra.

Pero Independiente -con oficio- no desesperó y siguió en su objetivo de percutir sobre el arco rival. El premio llegó con una linda jugada de fútbol gestada por Kénner Arce y Billy Arce y completada por Luis Ayala que colocó un centro preciso y a la carrera para Maximiliano Barreiro que definió preciso para el 1-1.

El camino de la clasificación parecía allanado cuando llegó el segundo gol para los sangolquileños. A los 64’, Billy Arce puso el segundo y todo era algarabía.

Banfield sintió el aguijonazo de quedarse fuera de la Copa y adelantó sus líneas dejando enormes espacios en la defensa. Arce y el capitán Sebastián Méndez tenían espacios para poner balones entre las líneas de retaguardia de los argentinos buscando a Estrada.

El delantero llegaba a todos los balones y quedó mano a mano con el golero Iván Arboleda, pero falló, falló continuamente dejando la clasificación de Independiente en el limbo. Así llegó el último minuto del partido.

Los hinchas de Independiente estaban con el santo en la boca, cuando el golero Piedra rechazó mal un balón que le quedó justito a Sperduti, que llevaba dos minutos en cancha y remató con todas las fuerzas de su pierna derecha para anotar el 2-2.

Era el fin del sueño copero de los ‘rayados’, que con esta ya llevan cinco Libertadores al hilo. No hubo tiempo para reaccionar. Al final, los muchachos se dirigieron al camerino sur del Atahualpa con la mirada al piso y sin respuestas por lo que había pasado.

Ahora, los argentinos de Banfield esperan a su siguiente rival que debe salir de la llave entre Nacional de Uruguay y Chapecoense.