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Futbolero
5 de diciembre de 2016 14:06

La suerte de 'Papá' se define en Guayaquil

Jairón Bonett (izq.) intenta escapar de la barrida de Walter Zea (der.) Alfredo Lagla / ÚN

Jairón Bonett (izq.) intenta escapar de la barrida de Walter Zea (der.) Alfredo Lagla / ÚN

Edwing Encalada

Aucas venció a Deportivo Cuenca (1-0) con solitario gol de Esteban Solari, pero con la victoria de Delfín ante River (1-0) en Guayaquil, ‘Papá’ le pone velitas a los santos para que se dé una ecuación que los mantenga en la Serie A.

La ecuación del milagro a la que se aferran los orientales, es vencer a Barcelona en el Monumental y esperar que Emelec derrote a Delfín en el Jocay. Pero allí no termina todo, ya que el gol diferencia es otro problema para los orientales.
Es decir, deben vencer a los toreros por dos o más goles y esperar un resultado similar de los eléctricos sobre los ‘cetáceos’.

En Chillogallo hasta hacen las comparaciones y esperan un escenario casi parecido al que se dio en el 2000, cuando Deportivo Quito y Barcelona peleaban la permanencia y el club que terminó perdiendo la categoría fue Liga de Quito.

La victoria de ayer de los orientales, tuvo tintes de drama, ya que la imprecisión, un factor que ha acompañado a Aucas durante toda la temporada, una vez más se presentó y hasta estuvo cerca de condenar a los dirigidos por Armando Osma.

‘Papá’ no se encontraba en la cancha, estuvo demasiado nervioso. Solo Ayrton Preciado fue el jugador que rompió el molde, siendo el que más se mostró en ataque y el que más se animó a buscar a sus compañeros en ofensiva.

De sus pies nació el único gol del partido, cuando desbordó por el costado derecho, escapó de la marca de Roberto Luzarraga y Diego Jerves y habilitó a Esteban Solari, quien de cabeza superó al portero Hamilton Piedra, al minuto 44.

El ‘Expreso Austral’ estuvo cerca de empatar el partido, de no ser por las oportunas atajadas de Johan Padilla y los solventes anticipos de Santiago Mallitasig, Édison Carcelén y Dennis Quiñónez.