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9 de abril de 2019 08:47

Las Agustinas le esperan con fanesca

El monasterio de las agustinas se ubica en la calle Benalcázar. Foto: Betty Beltrán / ÚN

El monasterio de las agustinas se ubica en la calle Benalcázar. Foto: Betty Beltrán / ÚN

Redacción Últimas Noticias
(I)

Las monjitas agustinas del monasterio de La Encarnación, ubicado en la Benalcázar entre Galápagos y Carchi, se alistan para celebrar la Semana Santa. Y lo harán con un recorrido por sus lugares santos y una rica fanesca.

El templo está en la loma de San Juan, y las religiosas agustinas contemplativas lo habitan desde 1877. El monasterio posee un balcón con una vista privilegiada de todas las iglesias del Centro de Quito, además se puede apreciar al norte y sur de la ciudad, y las montañas que la cobijan.

Las personas que deseen formar parte de esta actividad solo tienen que asistir al templo, los días 12, 13 y 14 de abril. Se prevén dos recorridos: de 09:00 a 12:00 y de 14:00 a 18:00. El costo: USD 5 los adultos y USD 3 los niños y personas de la tercera edad.

Con ese dinero también recibirán, al final del recorrido, la fanesca. Será bien sabrosa, promete la madre Ana Lucía del Espíritu Santo, priora del monasterio también llamado de las Madres Agustinas.

El ingreso será por la iglesia, cuya puerta principal está en la esquina de la Galápagos Oe584 y Benalcázar. Irá con zapatos cómodos porque el recorrido será largo. Comenzará en el templo, de ahí al herbolario, donde comenzarán las 12 estaciones. Luego irán por las escaleras de piedra, coro alto, torre y de vuelta al templo donde está la patrona de la orden: Nuestra Señora de la Consolación.

Allí también están la Virgen de la Encarnación, Santa Mónica, Santa Rita, las imágenes de San Gregorio Magno, San Ambrosio y San Agustín, este último con su corazón en la mano. Según la leyenda, su corazón está ardiente de pasión hacia Dios. Las religiosas conservan también un antiguo melodio de madera y a pedales, que aún funciona.

Una vez que visiten el cementerio de las monjitas, pasará a un espacio donde se exhiben los productos que las religiosas hacen para mantenerse. Son de buena calidad y hay desde agua de rosas hasta la esencia de lechuga, cremas para frenar la vejez, incluso un licor de canario y las conocidísimas delicadas y pasteles. Seguro se aficionará de alguno de esos productos.

Y le harán pasar al comedor de las religiosas a degustar la fanesca milagrosa hecha con las manos de estas mujeres de claustro. A un lado de las mesas estarán, con un costo adicional, higos con queso y pristiños. ¡Harán el gasto, verán!

La Priora asegura que este recorrido será reconfortante. Si tienen alguna duda llame al 099 302 8808 o al 023 150 327.