Por capas se analizó pintura en la Capilla de Cantuña
Capa por capa se chequeó la pintura mural encontrada detrás del retablo de San Lucas, en la Capilla de Cantuña. Con el análisis se definió que en la obra del siglo XVII se usó una técnica mixta.
En cristiano, explica Karina Noboa, restauradora del Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP), en pintura, hay varias técnicas: óleo, acuarela, pastel, temple, etc. Estas se dividen según la forma cómo se diluyen y fijan los pigmentos sobre el soporte en el que se trabaja.
En la obra, según los resultados obtenidos en el laboratorio del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), se definió que en los materiales utilizados en esta imagen, de entrada, en los rojos se empleó minio y cinabrio; para el verde, la malaquita; para el azul, el índigo y para el amarillo, el ocre de Andaluz.
Noboa apunta que en la obra hallada se mezclaron los pigmentos rojo y verde con agua de cal y el azul, con otro aglutinante orgánico que no pudo ser identificado.
Para el análisis se realizaron cuatro tomas de muestras: azul, manto de la Virgen; rojo, manto de San Juan; verde, túnica de San Juan y ocre, de la Cruz.
Como hasta la reciente intervención de la Capilla de Cantuña, emprendida por el Municipio de Quito, no había registro de la obra, el IMP ya está elaborando la ficha de inventario patrimonial de esta.
La plataforma habilitada para inscribirse y visitar la capilla cerró debido a la lluvia de apuntados, 490. Analizarán si hay chance de habilitarla nuevamente.
