Ángel Guardián ¿le compite al 911?
Nuevita, recién con una semana en el ruedo, la aplicación ‘Ángel Guardián’ ya registra 1 000 descargas. Se trata de una iniciativa del Municipio de Quito para acolitar a la comunidad en temas de seguridad vial, robos en el transporte público, parques y plazas. Además, le sirve para alertar en caso de acoso, ‘bullying’, trabajo infantil y hasta mendicidad.
La iniciativa, que se lanzó el viernes 1 de febrero, también va de la mano con la opción de enviar un mensaje al 6367, con la palabra Ayuda. Entre la ‘app’ y los mensajes de texto, hasta el mediodía de ayer, ya se habían registrado alrededor de 20 reportes. Los principales: robo en transporte público, acoso y ‘bullying’.
Si quiere descargar la plataforma debe buscarla en la tienda de aplicaciones de su teléfono celular.
Andrea González, secretaria de Comunicación del Municipio, explica que la iniciativa no quiere hacerle la competencia a la línea directa de emergencia 9-1-1. Por el contrario, la meta es apoyar a este organismo.
La prioridad del 9-1-1, explica, es la atención de emergencias. A través de la iniciativa municipal se puede acudir a resolver, sobre todo, casos de índole social como trabajo infantil o mendicidad, asuntos que directamente atienden las entidades municipales, como el Patronato San José.
O si, por ejemplo, se trata de seguridad vial, puede coordinar con la Agencia Metropolitana de Tránsito. O si ve o sufre un robo en un bus, también puede emplear el mecanismo. “En casos de emergencia inminente deben seguir llamando al 9-1-1”.
Desde el ECU 9-1-1 señalaron que la institución ha construido un alto nivel de confianza en la ciudadanía en sus siete años de existencia. Aclararon que la institución “no tiene atribución sobre las emergencias que se atiendan a través del aplicativo del Municipio, ya que a escala nacional el número único establecido es el 9-1-1, que fue creado para optimizar tiempos de respuesta y coordinar la atención de emergencias”.
Según la entidad, el tiempo que tarda el recurso asignado para la emergencia, desde que se despacha es, por ejemplo, de alrededor de cuatro minutos con 46 segundos en casos de seguridad ciudadana.
González agregó que si por ejemplo, tiene un robo en su casa, no podrán ayudarle desde el lado municipal. “(‘Ángel Guardián’) es un apoyo no un reemplazo (del 9-1-1)”, insistió.
El ECU, solo en enero, recibió 2 175 alertas de diferente naturaleza. Todas se reciben en las instalaciones del Itchimbía, desde donde se vigilan las distintas cámaras de vigilancia.
El Municipio, en cambio, recepta las alertas en el centro instalado en La Magdalena, en las instalaciones de la Empresa de Pasajeros.
En el lugar se chequea la operación del transporte público y también se reciben las notificaciones de la iniciativa ‘Bájale al acoso’. Desde el lanzamiento de ‘Ángel Guardián’, también están pilas a las nuevas alertas. Tienen instalada una plataforma para chequear cada una.
En el sitio hay personal de transporte, AMT y Policía Metropolitana. Y, claro, hay personal que encamina los casos de corte más social. En toda la ciudad hay
1 800 efectivos de tránsito, 1 400 metropolitanos, más la gente del Patronato.
Luego de que llega la notificación del ciudadano, le devuelven la llamada para verificar la necesidad.
