Un colector en lugar del puente
Un colector grandote será la solución para el sector de La Armenia, luego del colapso que sufriera en marzo el puente que atravesaba la quebrada Huasipungo.
El gerente subrogante de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), Juan Pablo Solórzano, explica que se analizaron varias alternativas antes de tomar la decisión final.
Hacer otro puente, como el que colapsó, definitivamente, no era la alternativa más adecuada, según el análisis que hicieron los técnicos.
Como explica Solórzano, el cauce en la hondonada es grande y, tarde o temprano, como ya ocurrió, terminaría socavando el terreno.
El cauce fue desviado cuando se construyó la estructura que recientemente colapsó. Pero el agua trata de seguir siempre su cauce natural.
También se analizó la construcción de un colector en la ruta actual de la quebrada y también esa alternativa presentaba riesgos a futuro no solo para la vía sino también para las viviendas aledañas.
Esta quebrada recibe agua a lo largo de 22 kilómetros. Incluso se la compara con el caudal que pueden tener las aguas que cruzan por el sector de El Trébol, o sea que no es cualquier cosa.
Las aguas bajan desde la zona de la Autopista General Rumiuñahui y, además, hay otras quebradas que aportan agua.
La decisión
Considerando todas esas circunstancias, finalmente, se decidió que la solución era recuperar el cauce original de la quebrada.
Como el paso del río ya está rellenado en un tramo, el colector que respetará el cauce original se construirá en una parte como un túnel y, en otra, a cielo abierto.
La estructura, tipo bóveda, tendrá 4,40 m x 4,40 m y una longitud de 136,78 m y obras de protección del cauce, como un disipador de energía para bajar la velocidad del agua cuando haya crecidas.
Sobre el colector se hará un relleno para que se empate la vía y puedan transitar las personas de los cerca de 15 barrios de la zona.
El presupuesto referencial es de 1 283 115,48 dólares. Sí hay la plata, una parte, alrededor del 60%, saldrá del presupuesto de la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento y el restante, de la Epmmop.
Con eso de los trámites y las contrataciones, según el Gerente, se prevé que la obra empiece en el último trimestre de este año y que esté lista, más o menos, para junio del 2018. Hasta mientras andan haciendo un plan de mitigación para la movilidad.
