Ataque mortal en una tienda de La Floresta
El ambiente era de consternación la mañana de ayer, 1 de julio del 2018 en el barrio La Floresta, ubicado en el centro-norte de Quito. La razón: el vrimen perpetrado en contra de una mujer en el interior de una tienda de abarrotes ubicada en la avenida Coruña y calle Guipúzcoa.
El hecho se produjo a las 16:20 del sábado 30 de junio. El capitán de Policía Marco Terán, jefe subrogante del Circuito La Mariscal, manifestó que la víctima tenía 49 años y se encontraba dentro del local con otras personas cuando ocurrió el crimen.
La víctima “tiene varios cortes con arma blanca”, contó el oficial. “No parece que fue un robo porque la señora tiene todas las pertenencias”, explicó.
El arma con la que se perpetró el crimen -indicó el oficial- fue hallada en el interior del local.
Ayer por la mañana, la Policía Nacional continuaba con las investigaciones para dar con los responsables del hecho.
Un grupo de agentes vestidos de civil estaba en las afueras del local en donde la víctima fue atacada. Ellos conversaban sobre las investigaciones. Junto a ellos estaban dos vehículos sin placa y un patrullero de la Policía.
En esos momentos, la gente los observaba con preocupación y comentaba en voz baja sobre lo que ocurrió.
El propietario de un local contó que es la primera vez que ocurre un crimen como este en el barrio. Pero, aseguró que el sector se ha vuelto peligroso, debido a los robos registrados en las panaderías y también en un asadero de pollos que funciona en el sector.
“Entran con pistolas, les quitan las cosas a los clientes, dueños de los locales y se van”, manifestó el hombre, refiriéndose a la forma en que se producen estos ataques en la zona. Añadió que hace dos meses, desconocidos se robaron los cerebros de dos automotores que estaban parqueados en las calles del barrio.
Otra moradora contó otro hecho relacionado con actos delincuenciales. Aseguró que a las 23:00 del jueves pasado, dos hombres asaltaron a un joven en las calles Lugo y Lérida. “Esa vía es un poco oscura y suele haber ese tipo de asaltos ahí”, aseguró.
Para otra vecina, la seguridad es escasa. “Hay asaltos, robos. A las chicas les quitan los celulares. Les arrebatan los bolsos”. Piden más control.
