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3 de septiembre de 2019 12:25

Bomberos no dejan el Pululahua

Un campamento de Bomberos se mantiene en la base del cráter del Pululahua. Foto: Twitter Cuerpo de Bomberos de Quito

Un campamento de Bomberos se mantiene en la base del cráter del Pululahua. Foto: Twitter Cuerpo de Bomberos de Quito

Redacción Últimas Noticias
(I)

Cuarenta miembros del Cuerpo de Bomberos de Quito permanecen en la Reserva Geobotánica del Pululahua, para evitar que el fuego que afectó esta zona no vuelva encenderse.

La mañana de este 3 de septiembre del 2019, la institución informó que en el sitio permanece un campamento en la base del cráter del volcán Pululahua, ubicado entre San Antonio de Pichincha y Calacalí, en el noroccidente de Quito.

Desde ese lugar se monitorea el incendio forestal que afecta a la Reserva desde la semana pasada. Se coordinan acciones para la liquidación total del fuego.

Los 40 bomberos se concentran este martes 3 de septiembre en las acciones de liquidación de focos secundarios y aislados del incendio.

El helicóptero Argus, del Cuerpo de Bomberos, aún continúa realizando descargas de agua con el sistema Bambi Bucket para enfriar el área desde el aire.

El incendio forestal en al Reserva Geobotánica se inició el viernes 23 de agosto del 2019, al mediodía. El fin de semana pasado logró ser controlado en sus focos más importantes.

Hasta el sábado 1 de septiembre se informó que el fuego había dañado a 67,23 hectáreas de bosque.

Más incendios

La tarde de ayer, 2 de septiembre, se reportó un conato de incendio forestal en la av. 6 de Diciembre, sector del Túnel de Guayasamín, norte de Quito.

Con la intervención de 20 bomberos, tres autobombas y dos camionetas se lograron controlar las llamas.

Los uniformados se quedaron en el lugar también para las labores de enfriamiento total del incendio.

Las autoridades solicitan a la ciudadanía que evite hacer fogatas en las zonas boscosas. También se pide que no se hagan las denominadas quemas agrícolas en las zonas de cultivos.

Las condiciones secas de la temporada, más los vientos fuertes que se mantienen en el Distrito Metropolitano, favorecen a la expansión del fuego que afecta amplias zonas verdes.