Las mamitas tuvieron su serenata con seguridad
Mamita es mamita y a ella se la festeja como se debe, con bombos y platillos. A pesar del confinamiento provocado por el covid-19, hijos y esposos se dieron modos para sorprenderlas.
Unos enviaron regalos y otros apostaron por las tradicionales serenatas.
Cristina Navarrete fue una de esas hijas que recurrió a los servicios de un mariachi para mimar a su mamita. Contrató a la agrupación Noches de México, integrada por cuatro músicos, quienes acudieron a la cita cumpliendo normas de seguridad como el uso de la mascarilla.
Giovanny Cadena, director del mariachi, contó que tras la aprobación de las autoridades para cumplir con las serenatas, entre el sábado y domingo, de 09:00 a 20:00, armaron un plan para garantizar su salud y la de sus clientes.
Por esa razón le solicitó a Navarrete que el pago lo realice mediante transferencia bancaria.
Ya en el lugar, entonaron cinco canciones para Gloria Mejía, la homenajeada. Ella observó el show desde el balcón de su vivienda.
Dejó que las lágrimas corrieran libremente por sus mejillas al escuchar el tema Todos tienen una madre.
Aunque la serenata era para Gloria, un par de mamitas disfrutaron de la presentación desde los balcones y ventanas aledañas.
Esta fue la cuarta serenata del mariachi Noches de México a propósito del Día de la Madre. Las tres primeras fueron virtuales. En total, dijo Cadena, tenían previsto 65 presentaciones durante el fin de semana, “la tercera parte de lo que generalmente sumamos en otros años”, es decir antes de que la pandemia azotara a la humanidad.
En el sur de la ciudad, las homenajeadas fueron las madres que trabajan en el hospital IESS Quito Sur, detrás del Centro Comercial El Recreo. Cubiertas con batas, cubrebocas, cofias y uniformes, las mujeres salieron poco a poco tras escuchar las primeras notas del Toro barroso. Los músicos, conservando la distancia entre sí, lucían uniformes de camuflaje.
Eran miembros de la banda del Ejército Ecuatoriano y llegaron con bombos, platillos, trompetas y otros instrumentos para ofrecer un homenaje a las mujeres que dejaron a sus hijos en casa para cuidar a los pacientes de covid-19 y otras dolencias que son atendidos en esa casa de salud.
La serenata también fue para aquellas mujeres que trabajan en la delicada área de limpieza hospitalaria o preparando alimentos.
Los regalos para las mamás llegaron en bici
Las bicicletas fueron el eje de la vialidad en Quito el pasado fin de semana. Vías como el corredor sur-occidental, Ecovía, exclusiva del Trole o el carril central de la autopista General Rumiñahui, fueron ocupados por los ciclistas, quienes ayer llevaron víveres y regalos para el celebrar el Día de la Madre.
Uno de estos ciclistas fue José Pullas, quien a las 06:30 salió desde el sector de la Atahualpa en su ‘bici’ para adquirir los últimos regalos para celebrar con su esposa, Aurora Mantilla.
“Por falta de tiempo, dejé para el último el regalo para mi esposa y mi mamá, pero lo que cuenta es el gesto”, reseña entre risas, mientras detuvo su camino en la avenida Mariscal Sucre.
Según el secretario de Movilidad, Guillermo Abad, el Municipio tiene proyectado la implementación de 63 km de ciclovía en el eje longitudinal de la ciudad, con un trazado similar al que utiliza actualmente el ciclopaseo dominical.
“La semana pasada empezamos a pintar una parte y esperamos terminar en mayo un buen porcentaje del proyecto, apuntando al cambio a semáforo amarillo”, explica Abad.
Adicionalmente, se pintó el trazado desde la calle Ramírez Dávalos hasta la Ignacio de Veintimilla.
Hoy se tiene previsto pintar en la av. Naciones Unidas, en el tramo comprendido entre las avs. América y 6 de Diciembre.
Abad indicó que buscan más seguridad al ciclista.
