Hola a José Valencia; chao a Espinosa
De hoy no pasa. María Fernanda Espinosa oficializa su renuncia y José Valencia asume el ‘puestito’ en la cabeza del Ministerio de Relaciones Exteriores. La tarde de este lunes, 11 de junio del 2018, a las 15:00 la ‘Mafer’ expondrá el informe del año de su gestión y será el último discurso como canciller.
Después de esta actividad, tiene que ponerse ‘pilas’ con su gestión como Presidenta de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU).
En su lugar entrará el diplomático Valencia. El anuncio de la designación ya lo había hecho el viernes, 8 de junio, la Secretaría Nacional de Comunicación (Secom).
José Samuel Valencia Amores, funcionario de 57 años. Hasta hoy trabajaba en la Embajada ante la Organización de Estados Americanos (OEA), en Washington.
El nuevo Ministro tiene ‘harta’ experiencia, empezó en diciembre de 1982 como funcionario de la Dirección de Promoción Económica, donde estuvo por cuatro años. Luego pasó a las direcciones de Soberanía Nacional y Protocolo.
Se estrenó en el campo internacional en 1988, cuando fue parte de la misión ecuatoriana en Nueva York, y participó del Consejo de Seguridad y de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas.
Lo más cerca que estuvo de su actual puesto fue cuando hizo las de Viceministro de Relaciones Exteriores durante la gestión de María Isabel Salvador, quien había reemplazado a María Fernanda Espinosa, luego de su primera gestión en la Cartera de Estado.
Valencia es doctor en Jurisprudencia, por la Universidad Católica de Quito.
Luego obtuvo un diplomado en Estudios Internacionales (1987) en la Escuela Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores de España. En 1995 alcanzó una maestría en Ciencias Políticas por la Universidad de Columbia (EE.UU.).
Los expertos opinan. Grace Jaramillo, Carlos Estarellas y el exvicencanciller Marcelo Fernández de Córdova marcan las prioridades para el nuevo canciller: dejar de lado la carga ideológica y trabajar por los intereses del Estado ecuatoriano y la defensa de los derechos humanos y el derecho internacional.
Resolver el caso Assange, que domine la diplomacia, que se encargue de reestructurar el servicio exterior y que coordine la política exterior con la política económica.
Pese a que Espinosa ya no es funcionaria, el juicio político aún puede efectivizarse. El Consejo de Administración Legislativa debe dar paso a la comisión de Fiscalización para que el trámite continúe y se determine si cabe una cesación.
