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17 de septiembre de 2018 11:32

Granizada desbarató los techos en Calderón

Los vecinos de los locales quedaron preocupados por las pérdidas. Fotos: Galo Paguay / ÚN

Los vecinos de los locales quedaron preocupados por las pérdidas. Fotos: Galo Paguay / ÚN

Diego Bravo
(I)

Los vecinos de Calderón estaban todavía consternados esta mañana (17 de septiembre del 2018) por las fuertes lluvias y granizo registrados en la tarde de ayer.

Los niños del sector jugaban con el granizo que continuaba acumulado en las veredas. Mientras tanto, obreros lo limpiaban y comerciantes evaluaban los daños en los techos de sus locales.

Ese era el panorama que se observó en la vía 24 de Junio de San Juan de Calderón y la intersección de la avenida Geovanny Calles y Carlos Mantilla.

Iván Ulcuango es propietario de una mecánica. Desde temprano observaba los daños en el techo de su negocio. “Todo fue de sorpresa, todo el patio estaba con granizo”.

El techo de zinc de la mecánica cedió por el peso del granizo. Calcula que reparar los daños le costará USD 5 000 aproximadamente. ¡Un platal!

Lo mismo se vivía en una ferretería de ese sector cuyo techo se desplomó, afectando la mercadería.

Se destruyeron baldosas, estanterías de madera y las cosas que se vendían allí. Sus propietarios no hablaron, pero los obreros comentaban que, gracias a Dios, ese local no abre los domingos. Cuando ocurrió la emergencia no había gente al interior.

Las calles del sector de la parroquia de Calderón, en el norte, aún tenían montones de granizo.

Las calles del sector de la parroquia de Calderón, en el norte, aún tenían montones de granizo.

Las fuertes lluvias de ayer causaron estragos. Un derrumbe y la afectación a viviendas son algunas de las consecuencias que dejó.

También se registró la acumulación de agua en las calles de esta zona. Según el ECU 911 Quito, se registró un deslizamiento de tierra en la calle Azalea, en el sector de la Cristianía, en el norte de la ciudad. Los organismos de socorro acudieron hasta el lugar y cerraron completamente la vía. Maquinaria pesada limpió la calzada.

El carpintero José Balcázar estaba preocupado. Ingresó agua a su taller. La mañana de hoy, aprovechó el sol de la mañana para sacar los muebles al patio y se sequen. También la madera del taller.

Incluso rompió una pared de su casa para que desfogue el agua. Esta ingresó a las habitaciones y mojó camas, colchones y cobijas. Por suerte - dijo Balcázar- los electrodomésticos no se dañaron. “El agua alcanzó una altura de 15 cm aproximadamente”.

La fuerza del agua afectó el techo de la vivienda de Juan Andrango, en donde funciona una vulcanizadora. “Salí a las 09:00 para comprar los útiles escolares de mi hijo. Al volver, me encuentro con que todo se mojó, camas, muebles”. Él y su familia lloraron de la desesperación y juntaron para dormir en un rincón de la casa.

Allí también funciona una cancha de ecuavóley, cuyo techo se desplomó. Su dueño, Juan Cornejo, dijo que los daños le costarán USD 15 000 aproximadamente.