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29 de diciembre de 2017 08:35

Inocentes, como pan caliente

Los lectores estaban contentos con la edición de Inocentes de este Diario. Foto: Betty Beltrán / ÚN

Los lectores estaban contentos con la edición de Inocentes de este Diario. Foto: Betty Beltrán / ÚN

Redacción Últimas Noticias

“A reír y a gozar con la edición especial de Inocentes de Últimas Noticias”. Ese era el grito que María Pérez, vendedora de periódicos, pegaba ayer en la esquina de las calles García Moreno y Bolívar.

El ejemplar, de 28 páginas, se vendió como ‘pan caliente’ y a tan solo USD 0,50, Hasta el mediodía, doña María solo tenía 10 de los 50 que había pedido. Así que, breve breve, solicitó más para no dejarles picados a sus fieles clientes.

Esa fue la tónica a lo largo y ancho de la ciudad. La edición se agotó. Aunque algunos voceadores pilas se quedaron con ejemplares para venderlos también hoy a la gente que por una u otra razón no alcanzó a adquirirlos ayer. Así que si usted es uno de ellos, pregúntele nomás a su voceador de confianza: “¿No tiene por ahí un Últimas de los Inocentes?”.

l Especial de Inocentes

Es que no puede quedarse sin leerlo. Vinicio Rodríguez, hincha del diario de Quito, compró ayer de una, dos periódicos. “Uno es para mi hermano y el otro para mi familia. Todos los años compro la edición especial para despedir el año con humor”.
Mientras hojeaba la edición, Rodríguez no dejó de sonreír con gusto. “El top cinco de las llaves del poder está impactante, las sátiras que se lanzan entre los políticos de moda son un goce. La que más me gustó fue el candado constitucional que le aplica el José Serrano a un enmascarado”.

Para el hombre, “es un humor fino que, entre broma y broma, pone el dedo en la llaga y muestra parte de la realidad política. Ese es el mérito de este producto”.
Luis González, otro hincha de la edición especial del diario de Quito, compró dos ejemplares. “Uno es para mi colección y el otro para que pase de mano en mano entre mis familiares y gocen con su lectura”.

Subrayó que el mérito de este producto es que, con humor, “se hace un llamado de atención a los políticos para que reflexionen y no hagan sufrir al pueblo”.
Mientras hablaban, a doña María se le agotaban los periódicos.