Instructor, indagado por pornografía

La Policía Antitrata de personas detuvo a un instructor de baile en el interior de un colegio del sur de Quito. Sobre él pesa una investigación fiscal por supuesta producción de pornografía infantil.

El hombre, un extranjero de 33 años, habría supuestamente instalado en los camerinos y baños de su academia de baile, en la casa comunal de un barrio del sur de Quito, diminutas cámaras de video con las que grababa a sus alumnas cuando se cambiaban de ropa, afirmó un oficial de la Unidad Antitrata a cargo de la investigación, quien prefirió mantener su nombre en reserva.

Según los agentes, la investigación se inició hace dos meses, cuando recibieron una denuncia de una víctima. En ese tiempo, se ejecutaron averiguaciones y seguimientos y, finalmente ayer, la Fiscalía y la Policía ejecutaron el arresto del sospechoso en el centro educativo, pues la institución lo habría contratado hace dos días para que organizara una coreografía.

Los uniformados trasladaron esposado al hombre hasta su domicilio, en el mismo barrio, en donde se realizó una requisa. Hasta ese lugar también acudió Criminalística, la Fiscalía y Agentes de la Dirección General de Inteligencia, quienes se encargaron de recoger las evidencias.

Allí, los investigadores encontraron videos de menores de edad desnudas y semidesnudas, películas pornográficas para adultos y dispositivos electrónicos como DVD, CD y memorias externas, indicó el jefe del operativo.

Toda esta evidencia fue trasladada a la Unidad de Flagrancia, en el norte de la capital, junto con el detenido, contra quien la Fiscalía formulará cargos. A su salida, moradores del sector le gritaron insultos. “Nos sentimos decepcionados, porque le dimos la confianza”, dijo un vecino.

Según el Código Integral Penal, la pornografía infantil es un delito considerado de lesa humanidad, que afecta de forma grave a los derechos humanos. La norma penal sanciona esta infracción con cárcel de
13 a 16 años.