Ofertaban ‘vacunas’ a personas con covid-19
Un operativo terminó con la clausura de un local que se presentaba como centro de terapias alternativas, en el barrio Caupicho, en el sur. Según las autoridades del Municipio, allí se comercializaban supuestas vacunas contra el covid-19.
César Díaz, secretario de Seguridad y Gobernabilidad de la Alcaldía, informó que se recolectaron testimonios de personas que acudieron a ese establecimiento. “Se daban 10 turnos diarios ofreciéndoles curar del coronavirus y también otros problemas de salud”, indicó.
Díaz dijo que este lugar regsitró su Licencia Única de Actividad Económica, hasta el 2014, como spa y centro de masajes, muy lejos de aquello a lo que ahora se dedicaba. Actualmente, no registra ningún permiso de funcionamiento, dijo la Agencia Metropolitana de Control. Por todo eso, se inició un proceso de sanción a los dueños.
En las investigaciones, aseguró el Municipio, se verificó que la dueña de ese centro suministró 70 mil dosis. Añadió que se cobraba USD 15 por la supuesta vacuna y cada persona debía recibir tres dosis.
Cristian Paredes, subintendente de Pichincha, señaló que las denuncias se receptaron desde hace una semana. “El Municipio hizo un trabajo de Inteligencia. Tenemos fotos, videos y argumentos suficientes para ver la mala práctica que se viene realizando”, aseguró el funcionario.
Se recuerda a la ciudadanía que, por ahora, las únicas vacunas contra el covid-19 autorizadas en el país son las de la farmacéutica Pfizer, que su distribución la hace, exclusivamente, el Gobierno a través de los hospitales y que su administración es gratuita.
Cuando comenzó el operativo, los pacientes que se encontraban en el lugar fueron desalojados. La propietaria, Lucía Peñafiel, manifestó que allí no se proporcionaban vacunas, sino vitaminas y sueros para subir las defensas.
Dijo que también se hacían tratamientos con rayos láser y con máquinas de luces infrarrojas. “He tratado a alrededor de 20 mil pacientes de coronavirus aquí”, aseguró. También les daba vitamina C y medicina para aliviar el dolor.
En el lugar los usuarios no usaban mascarilla y se aglomeraban mientras esperaban su turno. Peñafiel afirmó que a su local han llegado policías, militares y funcionarios de gobierno, quienes se atendieron con “terapia infrarroja”.
Los vecinos se molestaron cuando arribaron las autoridades y pidieron que no se clausurara el local. “Me enfermé de covid-19 y la doctorita me salvó. Yo creo que la Virgencita la protege y a nosotros también porque somos devotos. Acá ha llegado gente en muy malas condiciones”, contó Angélica Masa. Historias similares contaron Carmen Parra e Isabel Bunshe.
Control. En el operativo participaron funcionarios de la Agencia Metropolitana de Control, Intendencia de Policía, Secretaría de Seguridad, Agentes Metropolitanos, Ministerio de Salud y la Arcsa.
