¿Será que quiere que le digan ‘dog’?
No tiene nombre, tampoco dueño. Pero camina a sus anchas por un sector del campus de la Escuela Politécnica Nacional. Se cree el amo y señor del edificio donde funciona el Centro de Educación Continua (Toledo N23-55 y Madrid).
En ese sitio se enseña, entre otras habilidades, idiomas (inglés, francés, mandarín...) y los horarios son continuos, así que el animalito ingresa orondo al edifico.
Suele aparecer entre las 08:00 y las 10:00. Los guardias ya están ojo al Cristo para impedir su ingreso. No ve que llega hasta las aulas y arma jaleo.
Pero los estudiantes y algunos profes, aplauden la hazaña de la mascota y le dan galletas o lo que tengan a mano. También se preguntan si, de pronto, su dueño está en alguna de las aulas y por eso llega derechito al tercer piso.
Han pasado los días y las semanas y nada con encontrar al supuesto dueño; tampoco un caritativo que finalmente le adopte.