Píntag mantiene vivo su arte
Los vecinos pinteños no quieren que las costumbres de sus abuelos y bisabuelos se pierdan. Por eso la parroquia ha resaltado en distintas partes del Ecuador por sus chagras (campesinos que conocen las labores agrícolas y ganaderas) y por el resto de sus tradiciones.
“Desde que yo me acuerdo, nuestro pueblo ha sido el mejor en la chagrería en la provincia de Pichincha”, comenta Pacífico Veloz, un vecino de 73 años, a quien le encantaba esta tradición desde muy pequeño.
Su padre también le enseñaba sobre la corrida de toros, concurso de lazo, doma de toros y potros. “Nosotros no hacemos los toros para matarlos o maltratarlos, sino para torearlos y distraernos. Luego, ellos vuelven a sus ganaderías”, agrega Veloz en defensa de esta actividad.
Sin embargo, su preocupación es que estos aprendizajes desaparezcan con el paso del tiempo. Por ello, él trata de enseñarles a sus nietos los conocimientos de chagrería que tiene.
Félix García, un pintor acuarelista, recuerda que siempre ha tenido interés en plasmar en obras las costumbres de Píntag.
Desde que era niño dibujaba temas taurinos. Un 95% de sus obras son de paisajes y personajes importantes del sector. Y hasta han sido reconocidas en el exterior. Además, como parte de sus pasatiempos están la fotografía y el video, tanto que guarda una colección de alrededor de 130 mil fotografías.
“Es importante mantener las costumbres de un pueblo y sentirse orgulloso de ello. También es necesario la educación en el rescate de la cultura, ya que un pueblo sin cultura es un pueblo destinado a morir”, señala el artista.
Él insiste en lo esencial de mostrar las costumbres de su pueblo, a través del arte, “a pesar de que haga falta más apoyo por parte de las autoridades e interés de los vecinos”. Para eso, añade, se pueden impartir más talleres de música y danza para todas las edades.
Con ello coincide Jorge Llulluna, gestor cultural y representante de la danza de los rucos del sector. Él considera oportuno el apoyo a los espacios culturales de la parroquia.
Hay guaguas y guambras, tanto de Píntag como de sectores aledaños, a los que les gusta estas actividades y buscan incorporarse en el cuerpo de baile local.
Él cuenta que algunos grupos de la parroquia y del valle de Los Chillos tienen su reconocimiento como patrimonio inmaterial del Ecuador; sin embargo, necesitan más respaldo. “Cuando hemos ido a participar en otros lados, ha sido por nuestros propios medios”, indica Llulluna.
A él le parece importante el que se mantenga la tradición de que en los repasos de baile, se dé de comer a los integrantes, se les brinde chicha, un vaso de jugo y un buen plato de comida.
De acuerdo con Edwin Puetate, vocero del Gobierno Parroquial, sí tratan de cohesionar a los grupos culturales, de manejar las redes que tienen y brindarles espacios para que muestren su arte y se activen.
Así señala que, en 2020 se inauguró el Centro Cultural de la parroquia como iniciativa de los representantes del arte. “Todos pueden llegar a ser parte de los procesos de capacitación para compartir conocimientos de danza, música, deporte”, menciona.
La idea que comparten los pinteños es que anhelan que su cultura se mantenga viva y perdure con los años.
