Piden plata para dar ‘información’
“Hemos recibido muchas llamadas falsas de gente inescrupulosa. Nos dijeron que la han visto en diferentes sitios y piden dinero, pero nada ha pasado”. Valeria Campos lo cuenta con dolor e indignación.
Ella es la madre de la maestra quiteña Michelle Montenegro, de 26 años, cuyo paradero es desconocido desde el pasado 5 de junio. Ese día salió de su casa en La Armenia, en el valle de Los Chillos.
La madre cuenta también que la familia alertó a la Policía sobre la llamada que recibieron de un hombre, quien les dijo que había visto a Michelle. “Se realizaron las investigaciones y se determinó que esa comunicación se realizó desde una cabina telefónica, pero ese local no tenía cámaras de seguridad. Esa persona no se identificó, tampoco ha vuelto a comunicarse, no hay algo concreto”.
La Policía, dice la señora, ha sido meticulosa y ha descartado que muchas de esas llamadas sean indicios reales. “Es muy duro cuando nos dicen esas cosas porque entramos en desesperación, tratamos de investigar y luego no tenemos pruebas verdaderas”.
La angustia sigue. Pero también la búsqueda. Ayer 13 de agosto, miembros de la Dinased, del GOE y del Cuerpo de Agentes Metropolitanos buscaron a la joven bajo el puente de la av. Simón Bolívar, en Guápulo.
“Se hizo un rastreo nuevamente, porque los testimonios de algunas personas coinciden que la vieron por última vez aquí, luego de su desaparición”, cuenta Campos. “Ya la buscaron en este sector, pero debajo del puente pequeño, ahora nos trasladamos al grande. También en otros puntos, como el reservorio de Guangopolo, pero no aparece”.
Contó que los familiares hacen sus propias indagaciones. “Este feriado nos dividimos para buscarla y dar a conocer el caso de Michelle en el país. Mis hijos viajaron a Perú, por si alguien la ha visto allí o nos dan indicios, pero ha sido inútil, no conseguimos nada”.
