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5 de octubre de 2018 12:42

29 años de prisión para dos maestros acusados de violación

La Fiscalía de Guayaquil impulsó el caso. Foto: Mario Faustos / ÚN

La Fiscalía de Guayaquil impulsó el caso. Foto: Mario Faustos / ÚN

Redacción Guayaquil
(I))

A las 00:00 de este 5 de octubre del 2018, terminó la audiencia de juzgamiento contra dos profesores acusados de violación a estudiantes de una unidad educativa en el norte de Guayaquil.

El Tribunal de Garantías Penales del Guayas sentenció a Bryan M. y Egry M. a 29 años y 4 meses de prisión, cada uno. Ellos fueron denunciados el 6 de octubre de 2017 por padres de familia del plantel. Los menores de seis y siete años, los señalaron como las personas que abusaban sexualmente de ellos, actos que eran cometidos en el interior de los baños.

Stives Reyes, abogado defensor de los niños y padres de familia, recordó que la audiencia de juzgamiento se aplazó tres veces por enfermedad de la defensa de los sentenciados.

El proceso concluye a dos días de que se cumpla un año desde que se denunció e investigó el caso. La investigación comenzó el 7 de octubre del 2017. Ese día, durante un allanamiento al plantel, fue detenido Bryan M. Después, en enero pasado, la Policía capturó a Egry M., quien estuvo prófugo y fue incluido en la lista de los Más Buscados.

Cuatro niños, de entre 7 y 8 años de edad, contaron a sus padres que eran obligados a ir a los baños del plantel. Ahí fueron abusados sexualmente. La madre de uno de los pequeños contó que su hijo le habría indicado que los abusos comenzaron un año antes.

La Fiscalía había pedido la pena máxima de 40 años tras las rejas. En las audiencias, que duraron más de diez días, acudieron cerca de 100 testigos.

Otros dos maestros fueron sentenciados por este caso, por el delito de tortura.
Eduardo B. y Máximo M. recibieron una pena de 17 años. Los niños los acusan de haberlos llevado a los baños, donde los amarraban, golpeaban, incluso eran fotografiados.

Otros procesos se abrieron contra las autoridades del plantel y del distrito. La defensa de los niños pidió indagarlos por presuntas negligencias y omisiones.