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17 de enero de 2018 06:37

La pugna ya es total en Alianza País

Los correístas se concentraron ayer, 16 de enero, en la tarde para reclamar por las acciones del Contencioso. Foto: Eduardo Terán / ÚN

Los correístas se concentraron ayer, 16 de enero, en la tarde para reclamar por las acciones del Contencioso. Foto: Eduardo Terán / ÚN

Redacción Política
(I)

Toma. El dueño del partido se quedó sin partido. Rafael Correa se desafilió de la tienda política de sus amores. Fue en la sede electoral de Babahoyo, en la provincia de Los Ríos, ayer, 16 de enero del 2018.

Ocurrió luego de que se enterara que el Tribunal Contencioso Electoral, el máximo organismo en esos menesteres, ratificara a la directiva cercana a Lenín Moreno en la cúpula del movimiento verdeflex.

Correa exclamó al cielo en contra de los ‘traidores’ y pidió a sus simpatizantes que se desafilien masivamente. Pero hasta ayer, los que acataron la disposición todavía se contaban en decenas no más.

Solo unas 50 solicitudes para salir de Alianza País se receptaron en la matriz del Consejo Nacional Electoral. Que no hay de qué preocuparse, advirtió la asambleísta Soledad Buendía.

Que las desafiliaciones serán progresivas y que toditos ahora estrenarán un movimiento que se llamará Revolución Ciudadana.

Pero ni apenas quisieron dar a luz al guagua, enseguida lo ahogaron en el Consejo Nacional Electoral. La solicitud que habían presentado los correístas para formarlo fue rechazada por ese ente.

Mientras eso ocurría en el Pleno del CNE, en la Asamblea Nacional, en cambio, las aguas ya se separaron por completo. Ya se sabe quién mismo se queda bajo el manto de Correa.

28 legisladores dijeron que si Moreno sabe contar, que no cuente con ellos para las votaciones de las leyes que vayan a proponer en lo que resta del período legislativo.

Ellos ahora intentarán formar una bancada propia, que ya no puede llamarse Alianza País, porque el descole ya es un hecho.

Por eso tratarán que oficialmente sean conocidos como los de la bancada de la Revolución Ciudadana.

Otro tropezón que dieron ayer los correístas fue en la sede de la avenida De los Shyris, en el norte de Quito.

Estaban tomados las instalaciones, pero ni medio se descuidaron les cambiaron los candados y ya no pudieron entrar a las oficinas.

Unos simpatizantes decidieron hacer justicia por mano propia y se pegaron con el local. Con tarros de aerosol pintaron toditas las paredes de la fachada con consignas en contra del presidente Moreno, la consulta popular y la directiva oficial de Alianza País.