placeholder
Las Últimas
29 de noviembre de 2021 20:13

Estefanía espera dejar huella

Estefanía valora que las exreinas sigan apoyando el trabajo cuando se van. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO

Estefanía valora que las exreinas sigan apoyando el trabajo cuando se van. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO

Redacción Últimas Noticias

La mayor parte de la niñez de Estefanía Álvarez Gordillo, la nueva reina de San Francisco de Quito, transcurrió en el barrio González Suárez, en el norte de la capital. Luego se trasladó con su familia al valle, donde aún reside.

Aunque se alejó un poco de la ciudad, en su memoria conserva los paseos con sus abuelitos, papás y hermanos en el Centro Histórico o en el concurrido parque de La Carolina. Hasta allá, dice, la llevaban a tomar helados y a pasear en
los caballos.

Esos son algunos de los recuerdos de la nueva soberana de la ciudad, a quien le hicieron madrugar para empezar con su nuevo reinado desde las 06:00 del viernes pasado.

Como uno de sus primeros actos oficiales, ella participó en la tradicional misa de Tedeum, junto a las principales autoridades de la ciudad y el mismo presidente Guillermo Lasso.

Y luego de un corto recorrido por el Casco Colonial, se subió a una chiva quiteña junto a su Corte para hablar de sus proyectos.

Estefanía tiene 24 años y es una flamante recién graduada en Comunicación Organizacional y Relaciones Públicas.

Ella tiene claro que el reinado no solo es un evento para destacar la belleza física o la inteligencia de la ganadora, sino una oportunidad para apoyar los proyectos que lleva adelante la Fundación Reina de Quito.

De hecho, Estefanía recuerda que antes de ser candidata ya era una admiradora del trabajo que desarrolla esta entidad.

Destaca la labor que la institución ejecuta para sacar adelante el centro terapéutico a su cargo. Ella anuncia, además, su empeño en impulsar los proyectos de las integrantes de su Corte y sacarlos adelante.

Pero su prioridad será su proyecto denominado ‘Juntas de la mano por tu futuro’. La iniciativa busca ser un soporte para los emprendimientos de mujeres que son cabeza de hogar, a través del uso adecuado de las plataformas digitales.

“Quiero que sepan dominar las herramientas digitales y como comunicadora social, que fue la profesión que estudié, quisiera compartir con ellas todo mi conocimiento para que puedan trabajar desde sus casas o desde donde estén, para posibilitarles que puedan cuidar a sus familias”.

Estefanía recuerda que cada soberana ha dejado su huella en la ciudad y no quiere ser la excepción. Por ello anuncia que no va a intercalar actividades particulares con las del reinado. Dedicará el 100% de su tiempo a ser la Reina de San Francisco de Quito.

Para ello cuenta con el apoyo de su familia y de su novio. Dice que todos están emocionados en su casa y listos para apoyarla. Está segura de que estarán muy involucrados con la ardua tarea que le espera.

La soberana de la capital no está de acuerdo con que los reinados cosifiquen a las mujeres. Dice que el certamen va más allá. Y la Fundación Reina de Quito también lo tiene clarito. “El trabajo que se hace supera el tema de la apariencia física o las cualidades que una persona pueda tener. Se trata de proyectos, de ayuda concreta a quienes lo necesitan y de trabajar para lograrlo”.

Estefanía considera especialmente importante la labor social en tiempo de pandemia. “El virus también nos enseñó que se pueden sacar adelante las ideas y los planes a través de la poderosa herramienta que es la tecnología”.