Ni respiran para que la tierra no se caiga

Angustiados, así están algunos habitantes del barrio La Pampa II, ubicado en la parroquia de Pomasqui. Según los dueños de varias viviendas que se encuentran dentro de conjuntos habitacionales, construidos cerca de una ladera, con las lluvias y el viento la tierra se desliza y los pone en peligro.

Comentan que hace seis años, dos viviendas tuvieron que ser desalojadas por el alto riesgo que corrían y poco después cayeron. Por ello, en plena época invernal solicitaron que el Municipio y las autoridades pertinentes realizaran inspecciones en la zona.

Eduardo Zurita, presidente del Conjunto Villas de La Pampa, afirmó que solo en su conjunto hay cinco casas que estarían en peligro. “Hace un tiempo ya perdimos una parte de la cancha. Ahora vemos la necesidad de prevenir, para que no existan accidentes”.

En ese conjunto se colocó una malla para evitar que los niños se acercaran.
Zurita asegura que han trabajado en equipo con los vecinos, construyeron taludes y terrazas para detener la caída de la tierra, sin embargo existe una parte que no cuenta con ninguna protección. “Hemos hecho varios llamados al Municipio, incluso estamos de acuerdo en colaborar pagando los materiales y que ellos pongan la maquinaria, para que se haga un talud que nos mantenga más tranquilos”, señaló.

Los vecinos aseguran que si no ha ocurrido ningún accidente hasta el momento es porque la zona es bastante árida.