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9 de octubre de 2019 10:37

En el barrio San Juanito montaron un peaje ilegal a la brava

Protesta en la Simón, a la altura del intercambiador que baja a la Rumiñahui. Foto: Betty Beltrán / ÚN

Protesta en la Simón, a la altura del intercambiador que baja a la Rumiñahui. Foto: Betty Beltrán / ÚN

Redacción Últimas Noticias
(I)

Ni bien amanecía, ayer, 8 de octubre del 2019, el cobro del peaje en la General Rumiñahui fue suspendido, pero al instante se habilitó otro en el barrio San Juanito, vecino de la autopista que une Quito con Los Chillos.

Por ese sitio era la única forma de ‘torear’ a los manifestantes que, poco antes de las 08:00, ya habían bloqueado un tramo de la Simón Bolívar, a la altura del intercambiador que conecta con la Rumiñahui (denominado ‘El desvío’).

Así que un grupo de mujeres cerró el paso por el camino que antiguamente pasaba el tren. Lo hicieron con llantas, palos y colchones viejos… Levantaron una suerte de peaje y pedían “una colaboración”.

Entre USD 1 y 50 centavos se les exigía para pasar bonitamente por ese punto y poder acceder a la General Rumiñahui o a la Simón Bolívar que estaban cerradas en ese tramo.

Uno que otro metía la mano al bolsillo y pagaba sin chistar. Eugenia Pérez, moradora de La Armenia (puente 9), fue una de ellas y contó que “en medio de este caos los vivísimos son más y para evitar problemas lo mejor es pagar”.

Además, recordó que supo de la existencia de esta vía alterna a través de unas compañeras que viven por el sector. Ellas le dijeron que por atrás de los barrios que están en la vera de la Autopista hay una vía para salir incluso a la Simón.

Otros conductores, los más indignados, no pagaron y dieron media vuelta a sus vehículos y retornaron por donde llegaron. O sea, por la vieja línea del tren que también pasa por el barrio Monjas Alto.

Mientras eso ocurría en el peaje improvisado de San Juanito, a unos 50 metros de allí -en plena Simón Bolívar- el grupo de indígenas que cerró los seis carriles ni siquiera a los motociclistas les permitían continuar. Solo pasaron una ambulancia y a un camión con la placa cubierta con plástico.

A eso de las 09:00, la humareda de la barricada que levantaron los manifestantes era más densa y se observaba desde todos los frentes de los barrios aledaños al punto en conflicto; es decir, desde San Juanito, Edén del Valle, Alma Lojana, 14 de Diciembre, Collacoto…

Para avivar las llamas, los líderes de la protesta comenzaron a exigir a los conductores que les entreguen gasolina, y con eso avivar el fuego de los palos y ramas que encontraban en el camino. También usaron la basura que estaba desperdigada por el sector.

En la autopista General Rumiñahui, a unos 200 metros del peaje, también hubo bloqueos, al igual que en el sector El Trébol. Los conductores buscaban rutas alternas, y si querían pasar por la antigua línea del tren de ley que tenían que pagar.