Una valla de plástico en pésimo estado
En uno de mis recorridos por el sur de Quito me fijé en el deterioro de unas vallas de plástico de color naranja. En la parada de San Diego, del corredor sur occidental, encontré uno de estos objetos. Esta valla lucía rota, aplastada y sucia.
En este momento hago un pedido a mis amigos del Municipio de Quito para que se reemplacen estos objetos, que ayudan a mejorar el tránsito en esta zona congestionada del sur.
En las noches estos objetos de tránsito son colocados para desviar a los automotores por el contraflujo.
Mi otro llamado es a mis amigos conductores. A ustedes quiero comprometerles para que juntos cuidemos estas vallas. Nos ayudan en el control de tránsito.
Recuerde que la idea es que mi ciudad se vea cada vez más linda.
Quiteños y quiteñas tomen en cuenta mi recomendación. No destruyan los bienes públicos porque un castigo tendrán. De uno a cinco días a la prisión irán o 50 horas de trabajo comunitario tendrán.
Esto se contempla en la Ordenanza 0332. Aprendamos a cuidar a la ciudad y para ello un compromiso enorme debemos hacer: no al vandalismo.
