Músico, poeta y profesor

Nació en Pujilí en 1933. Obtuvo 45 condecoraciones. Fue maestro del Mejía por 25 años.

No se acuesta con sus fantasmas, porque no cree en ellos, pero sí vive a solas con sus recuerdos. Sus únicos compañeros son esos 57 diplomas, fotografías y poemas enmarcados, que cuelgan con descuido de las paredes de su pequeño departamento, ubicado en el tercer piso de un edificio con vista al parque América.Y un sinfín de libros de todas las índoles, temas y materias. Estos ocupan varios libreros y hasta los rincones más oscuros. Ellos son testigos de la ajetreada, comprometida y reconocida bitácora existencial de Rafael Ruiz Cruz, un polifacético músico, poeta, catedrático y yogui nacido hace 82 años en el cantón cotopaxense de Pujilí, pero que se forjó en Quito como varón.

Músico desde los 15 años (formó una reconocida orquesta con sus hermanos) y maestro de campesinos desde los 18, Ruiz supo ponerles pies a sus sueños a costa de sacrificios y de una indudable capacidad intelectual.

Graduado en el normal Dr. Pablo Herrera de su terruño, pasó dos años remontado en Parlopo Taobilín, una comuna indígena escondida en la cordillera Central, a 4 000 metros de altura.

De ese campamento inhóspito le queda su mejor anécdota: una escuelita levantada a fuerza de mingas y con la paja paramera como único material.

Ya en Quito, Ruiz se dedicó de cuerpo entero a lo que más le gustaba: leer y estudiar. Entonces obtuvo dos licenciaturas, dos doctorados, una especialización musical en el Conservatorio... se volvió adicto al yoga... Y empezó a compartir sus conocimientos, a escribir libros y a componer canciones.

Enseñó en escuelas y colegios de Otavalo, Salcedo, Atuntaqui. Fue profesor del Colegio Militar Eloy Alfaro; del patrón Mejía por 25 años; de la Facultad de Comunicación de la Central por 35...

Soltero empedernido, se jubiló hace 8 años. Es vegetariano y hasta ahora nunca se ha enfermado de nada. Ya se acostumbró a vivir solo y quiere existir hasta los 95 y pico... Ahhh, ya está un poco sordo.

Víctor Vizuete E.

Más de Chulla vida:

Apasionado de la historia Una dama de hierro Quitólogo y radiodifusor Un 'Diablo' para toros'