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Noticias
8 de abril de 2020 10:47

Enfrentamientos entre informales y agentes

En la zona de Chiriyacu hubo  agresiones entre agentes e informales

En la zona de Chiriyacu hubo agresiones entre agentes e informales. Eduardo Terán / ÚN

Redacción Quito

Por un lado, agentes metropolitanos controlando el orden en la ciudad, evitando ventas ambulantes que generen aglomeraciones que pueden volverse focos de infección y propagar el covid-19.

Por el otro, comerciantes informales tratando de defender su fuente de empleo, suplicando que no se lleven sus productos y argumentando que si no venden, sus familias no comen.

Momentos tensos se vivieron en algunos puntos de la ciudad la mañana de ayer. Brigadas de militares, policías nacionales y agentes metropolitanos recorrieron parte del sur de la ciudad y solicitaron a las personas que no salgan de sus viviendas para precautelar su salud.

Los enfrentamientos más fuertes se dieron en el sector del mercado de Chiriyacu. Allí, hubo roces e insultos fuertes entre los comerciantes y los agentes del orden. Incluso en un momento, volaban por los aires frutas, hortalizas, piedras y palos. Los agentes se defendían con sus toletes. Finalmente, luego de los forcejeos, los agentes retiraron manzanas, aguacates, verde, y más. Por fortuna, no hubo heridos.

Los uniformados también visitaron el sector de la Magdalena, en donde los policías metropolitanos retiraron las canastas con productos de primera necesidad a los ambulantes.

Forcejearon con los vendedores hasta quitarles los alimentos y los colocaron en un pequeño camión de la Policía Metropolitana y en camionetas. Luego los agentes recorrieron la av. Rodrigo de Chávez hasta llegar al sector del Camal.

En el trayecto, decenas de transeúntes observaban cómo los uniformados tomaban las canastas con alimentos. La mayoría utilizaba mascarillas y guantes de látex; unos pocos caminaban sin protección.

Al llegar a la av. Maldonado y El Corazón, se llevaron las frutas de una comerciante, quien trató de evitarlo. Forcejeaba con los agentes y se quejaba llorando de que no tiene otras formas de trabajar para mantener a su familia.

En la intervención participaron 80 efectivos. Las autoridades indicaron que ya se realizaron varias socializaciones y ahora los operativos serán más rigurosos.