El uso de la mascarilla se generaliza
Mientras en los mercados de la urbe se mantenía un control riguroso para que las personas ingresaran, tomando en cuenta el último dígito de la cédula de identidad y realizando procesos de desinfección del calzado, hubo comercios, como bodegas de alimentos, donde no se respetaba la distancia recomendada.
En la feria de Guamaní se registró gran afluencia de compradores, ayer. Al ser un espacio abierto, a diferencia de en los mercados cerrados, no hubo restricción de ingreso. La gran mayoría de personas tomó la precaución de acudir con mascarillas. Sin embargo, en contados casos, no la utilizaron. También se pudo observar presencia de niños y adultos mayores.
En bodegas de ese sector, las personas se aglomeraban para abastecerse de alimentos, aunque, la gran mayoría usaba mascarilla. En esos lugares, los usuarios no guardaban la distancia de al menos un metro y medio para comprar.
Este Diario también recorrió la avenida Maldonado y varios sectores del norte del Distrito. A lo largo de la arteria vial, en el sur, hubo una notable circulación de personas, tanto caminando como en vehículos. De igual forma, se observó la presencia de varios vendedores ambulantes.
En el norte, en cambio, en sectores como la Vicentina, Floresta y Cotocollao, el flujo de personas fue mucho menor. Aunque, una imagen se repitió en locales de alimentos: compradores, con mascarillas, sin mantener la distancia requerida. En el bulevar y en el parque de Cotocollao las aceras lucían despejadas y no hubo movimiento comercial.
Fuentes del Municipio recordaron que si bien hay controles permanentes en calles y mercados, la comunidad está llamada a colaborar, quedarse en casa y salir solo cuando sea estrictamente necesario, como para abastecerse de alimentos.
Señalaron que se está haciendo lo posible para ayudar, pero no se puede poner un agente por cada persona. De ahí la importancia de la colaboración ciudadana.
