¡Qué despecho que da caminar por algunos sectores de Quito! No sé por qué algunos vecinos no les hace feo ver que en frente de su propiedad la acera está hecha una lástima.

Como peatón, uno esperaría que las aceras estuvieran despejadas para caminar con tranquilidad. Sin embargo, a veces uno se topa con obstáculos que hay que esquivar.

Un tramo de la acera en la calle Humberto Albornoz ubicado en el barrio La Comuna, en el noroccidente de Quito, está en malas condiciones.

Me fue imposible caminar por una de las aceras del barrio Solanda, en el sur de Quito.

La hierba crece en la acera y a nadie le importa. De eso me pude dar cuenta el fin de semana pasado que caminaba por la avenida 12 de Octubre, en el norte de Quito, con dirección hacia la casa de un familiar que no visitaba hace mucho tiempo.