Siempre que salgo a caminar por Quito, por más contento que esté, de repente algo me baja la alegría. Me pasó el sábado 3 de agosto del 2019, que fui a caminar por la tranquila calle La Pradera, en dirección a la Diego de Almagro, en el norte.

Qué tristeza ver el parque de un barrio en malas condiciones. Cada vez que veo hierba crecida, basura o desechos de una mascota por esos espacios públicos se me viene una idea a la mente: ¿dónde jugarán los niños del sector?

Los parques son espacios para que los niños y jóvenes disfruten de su tiempo libre. El problema es cuando esos sitios que son de uso público están desatendidos y la ciudadanía prefiere no utilizarlos.

Con costal en mano, unos guantes y harta voluntad por el planeta arrancó la minga en el Centro de Quito. 25 voluntarios le entraron a la convocatoria de PlastiCo Project, una organización ambiental que nació en el 2017.

Es una de las calles más aniñadas del norte de Quito, donde abundan locales comerciales y edificios con departamentos super caros, pero ni por eso se libra de los vendedores ambulantes.

Una linda vereda de adoquines de varios tonos está en el lado oriental de la avenida Maldonado, a la altura de la intersección con la calle Guanazán, en el sur de Quito.

En el barrio 5 de Febrero, sector Santa Bárbara, próximo a la calle Arsenio Andrade y junto a la escuela Camilo Gallegos Toledo, en el sur de Quito, hay un parque en pésimo estado. Me fui para allá el otro día y el sitio luce muy descuidado: tiene juegos rotos, mucha basura, escombros y hierbas crecidas.

Hace algunas décadas, Llano Grande, en el extremo norte de Quito, era una zona agrícola, de población mayoritariamente indígena especializada en el cultivo de maíz. Tras la expansión de la ciudad, llegaron las fábricas y las urbanizaciones.

Aprovechando el rico sol que salió el fin de semana, unos panas me invitaron a jugar fútbol en La Pulida, en el norte de Quito. Uno que anda bien emocionado con la campaña de la Mini Tri en Polonia, no lo piensa dos veces y acepta cualquier reto futbolístico.

El otro día estaba por el tradicional San Juan. Aproveché para ir por ahí con unos familiares.

Con risas y un claro mensaje de responsabilidad, se llevó a cabo ayer, 20 de mayo del 2019, una obra de teatro de Arcandina, con el objetivo de concienciar a la gente sobre la disposición de la basura.

El piso es tan irregular que caminar por ese tramo con zapatos de taco es prácticamente imposible.

En abril del 2019, la Empresa Pública Metropolitana de Gestión Integral de Residuos Sólidos (Emgirs) iniciará la construcción de un punto ecológico en la zona del parque lineal de Solanda (sur de Quito) en el que se rellenó una quebrada.

Un recién nacido fue localizado este 26 de marzo del 2019 con signos vitales en el interior de un cubo de basura en las inmediaciones de una vía del noroeste de Guayaquil, informó el Servicio Integrado de Seguridad ECU 911.

Los cuatro nuevos recolectores de basura estarán en los sectores de Caupicho, Quitumbe, Solanda, El Calzado y Chillogallo, en el sur de la ciudad.

Cuatro vehículos recolectores comienzan a trabajar desde las 20:00 de hoy, 19 de marzo del 2019, en el sur de Quito. Estos llegaron, a las 11:00 de ayer, lunes 18, a las instalaciones de la Empresa Pública Metropolitana de Aseo (Emaseo).

Es el punto de encuentro del barrio. La Plaza de Cotocollao, en el norte de Quito, es el lugar donde los abuelos salen a mirar y alimentar a las palomas, y donde los niños juegan los fines de semana. Sin embargo, tiene dos problemas: la basura y la presencia de personas en estado de mendicidad.

La basura se acumula en las esquinas y calles de la Ferroviaria Alta, un populoso barrio localizado en el sur de Quito. Ayer, 21 de febrero del 2019, los desperdicios estaban regados a lo largo de la calle Nariz del Diablo ante la mirada de niños, personas adultas mayores y mujeres que caminaban por allí.

El otro día cuando estaba con unos amigos que llegaron a visitar los lugares turísticos más bellos de Quito, se me ocurrió llevarlos al Mirador de Guápulo, pero se me cayó la cara de vergüenza cuando cruzamos entre las calles Baron Alexander von Humboldt y San Ignacio.

En la esquina de las calles Calvas y Rafael Arteta, en el sector de Chiriyacu (sur de Quito) se puede observar una mancha de color café en la acera y la pared.