El QuitoZoo le dijo adiós a uno de sus animales más queridos. Se trata de Suro, el oso de anteojos que llegó al centro de cuidado de vida silvestre cuando era pequeño.

El oso andino, el jaguar, los monos araña, el tapir, el caimán, el águila monera y el hormiguero esperan por un padrino para poder seguir con sus tratamientos para estar sanos.

Donar o comprar productos. Ambas opciones valen para apoyar al Zoológico de Quito. Verá que todos los días llegan animales silvestres rescatados que son víctimas del tráfico, maltrato animal y la mascotización. Hay una clínica para la atención.

Agradecido con la gente que este fin de semana llegó al Zoológico de Quito está su director Martín Bustamante. El ‘zoo’ reabrió sus puertas el pasado 2 de julio del 2020 y el número de visitantes superó las expectativas.

Búhos, perezosos, cusumbos...; el Sendero Encantado, el bosque seco, la fogata y el camping, los mitos y las leyendas. De todo ese mundo mágico podrá disfrutar en el Zoológico de Quito.

Se llama Loli y es una olinguita, la primera de su especie en cautiverio producto del tráfico de animales silvestres en el país. Llegó al Zoológico de Quito, en Guayllabamba, en el 2016, y ahora es el deleite de los peques.