La Primera Dama con agenda llena
La primera actividad del día fue en el cambio de Guardia, en Carondelet. Rocío González acompañó a su esposo, el presidente Lenín Moreno, durante la ceremonia militar.
En el balcón presidencial también estuvieron algunos ministros, la nueva vicepresidenta, María Alejandra Vicuña, y un grupo de niñas, quienes viajaron a Quito desde distintas provincias.
El homenaje era para ellas, como celebración, un poquito postergada, del Día Internacional de la Niña. Todas vestían camisetas rosadas y se sacaban fotos durante el evento.
Inmediatamente, se subieron a un autobús y acompañaron a la Primera Dama a su segundo encuentro del día, en el albergue San Juan de Dios.
La visita duró más de una hora, en la que las niñas y los viejitos del albergue compartieron bailes, canciones y discursos.
La Primera Dama permaneció sentada en la mesa para los invitados principales, junto a las autoridades que la acompañaban. No se levantó a zapatear con los agasajados.
Después, todas regresaron a Carondelet, donde la Primera Dama tuvo una conversación con las niñas, en la que la acompañaron de nuevo los ministros y la Vicepresidenta. González dijo que el objetivo era escuchar sus propuestas e inquietudes.
