Un hijo de Tumbaco defiende a la Tri
Nancy Vega, la mamá de Luis Segovia, seleccionado Sub 20 de Ecuador, cuenta que le ayudaba en las tareas escolares. Siempre estuvo a su lado impulsándolo a que no deje el fútbol, pero sobre todo a que no abandone el estudio.
El zaguero nacido en Tumbaco -integrante de El Nacional y de la Selección Sub 20- alternó los estudios con los entrenamientos y logró graduarse de bachiller. Siempre quiso ser futbolista y siempre contó con el apoyo familiar.
Por eso, ahora que juega el Sudamericano, la familia no podía faltar: sus papitos y demás miembros del círculo más íntimo han estado presentes en los juegos.
“Le acompañamos en todos los partidos. Él es un buen chico, muy disciplinado y bien educadito”, le dice don Luis Segovia padre a ÚLTIMAS.
Por los partidos del Sub 20, la familia Segovia tuvo un fin de semana fuera de su natal Tumbaco.
Luis Segovia, papá, su esposa Nancy y dos parientes más pasearon por Riobamba y Ambato. Todos los días religiosamente, visitaron a ‘Luisito’ en la concentración de la mini Tri.
La familia ha sostenido con el pichón de crack conversaciones largas y entretenidas. La familia se preocupa por la salud y por eso le llevan bufandas, guantes y gorras de lana para combatir el frío de la Sierra centro.
Una de las costumbres que siempre tiene Segovia es que une sus manos, inclina la cabeza y pide la bendición cuando se despiden. La madre le da un beso y lo abraza. Lo consiente y sabe que está feliz por el gran momento que vive en su carrera. Busca la clasificación a un Mundial y también sueña con ser protagonista en su club en la Copa Libertadores.
Puertas adentro en la Tri, Segovia hace pata con Adolfo Muñoz, su amigo en el Nachito. Se lleva bien con todos los compañeros, pero siempre bromea con Muñoz.
En la cancha también es muy obediente. El DT Javier Rodríguez siempre le aconseja que no se desespere cuando tiene la pelota en sus pies. Segovia está seguro que la Tri sí avanzará en el Sudamericano hasta el hexagonal final.
