Liberado hombre que se iba a lanzar del puente sobre el río Chiche
La audiencia de formulación de cargos duró unos 60 minutos. A la 01:00 de ayer se realizó la diligencia contra Vicente H. Al parecer, el hombre, con un menor de edad entre sus brazos, intentó lanzarse -el pasado domingo- desde el puente del río Chiche.
Una hora después de instalada la audiencia, a eso de las 02:00, fue puesto en libertad, pues la Fiscalía no contó con los elementos suficientes para formular cargos. Se presume un delito de violencia psicológica contra la mujer o miembros del núcleo familiar.
Eso sí, a la par de dejar el caso en investigación previa, el juez también dictó medidas de protección en favor de la madre del niño.
Incluso se prohibió que Vicente H. se le acerque o haga actos de persecución o de intimidación; se extendió una boleta de auxilio a favor de la madre del menor. Y se ordenó tratamiento psicológico a Vicente H.
El suceso en el puente del río Chiche ocurrió el domingo, alrededor de las 13:45. El joven, junto con el menor de edad, estaba encaramado en unas vigas metálicas del enorme puente. La emergencia demoró 45 minutos, contó el teniente Danilo Parra, comandante de la Unidad de Cumbayá del Cuerpo de Bomberos Quito.
El oficial recordó que trató de acercarse al hombre y hablarle. Lo hizo con sumo cuidado. Lo primero que le dijo fue que estuviera tranquilo, que quería ayudarlo, que evitara algún movimiento brusco.
El joven, contó el oficial de los Bomberos, no contestaba, lo único que hacía era mover la cabeza. Al final, el hombre que llevaba unas gafas de sol, accedió a que le ayuden.
Antes le explicaron qué se iba a realizar. El teniente Parra le indicó que dos de sus compañeros le brindarían seguridad (líneas de vida) y se colocaría una escalera para que descendiera. Entonces, con movimientos de cabeza indicó que entendía todo y que permitiría laborar a los bomberos.
Así fue como dos uniformados ascendieron por la parte lateral del puente. Solo cuando estuvieron arriba y antes de que se acercaran al joven, el teniente volvió a hablar con el hombre encaramado y le señaló que no se preocupara, que su hijo permanecería con él.
Le aseguró que no le iba a pasar nada, que solo estaban ahí para asegurarle a unas cuerdas. Allí, Vicente H. permitió que los casacas rojas se le acercaran y, posteriormente, entregó al pequeño para que lo bajaran hasta la ambulancia.
Parra mencionó que el niño estaba llorando y no quería separarse del papá. Así que intentó calmarlo y con palabras suaves le dijo que le iba a llevar hasta un carro de bomberos y que abajo estaba su madre. El oficial lo abrazó y lo bajó.
Enseguida lo entregó a los paramédicos para una valoración, y luego a los brazos de su madre. Cuando bajaron al padre también lo revisaron los paramédicos y al final la Policía Nacional lo detuvo.
